Proyecto busca establecer una distancia de 150 kilómetros entre peajes

Múltiples han sido las quejas que han girado en torno a los peajes en Colombia y en especial en el departamento del Atlántico, que cuenta con una extensión de 3.386 kilómetros cuadrados y en el que están establecidos al menos seis de estos puntos de cobro.

Las comunidades han salido a las calles en reiteradas ocasiones para rechazar el número de peajes y el cobro 'excesivo' de estos. Han argumentado que se hace 'insostenible' su pago y que tener muchos también es 'contraproducente' para el desarrollo económico de las poblaciones cercanas que viven del turismo.

Lo anterior porque le resta visitantes a la zona por el 'gasto elevado' que deben realizar las personas para poder ingresar al territorio.

A partir de casos como este nace el proyecto de ley que busca establecer una distancia mínima de 150 kilómetros lineales de un peaje al otro. Esta iniciativa, que es liderada por el senador de Alianza Verde Fabián Díaz ha generado cierta polémica porque hay quienes afirman que esto aumentaría los costos de las tarifas.

En diálogo con EL HERALDO, el congresista explicó el proyecto y argumentó que la excesiva cantidad de peajes a tan corta distancia está generando múltiples problemas sociales y económicos.

Sostuvo que entre los problemas económicos se pueden encontrar el impacto directo sobre el poder adquisitivo de las poblaciones colindantes al peaje, un desincentivo al turismo y generador de congestión vehicular, entre otros.

'La regulación que proponemos elimina los peajes internos en los municipios y aquellos que se encuentren en vías de acceso a aeropuertos, establece una tarifa de peajes más baja para el transporte de productos agropecuarios de nuestros campesinos, detiene el abuso en el alza de las tarifas estableciendo como máximo un incremento igual al IPC', dijo.

Precisó que pese a lo recaudado por las concesiones en los peajes, el estado de las carreteras es 'deplorable'. 'Anualmente los peajes están recaudando sumas que están entre los 3 y 4 billones de pesos, que no se ven reflejados. Precisamente pagamos para garantizar un estado óptimo de la infraestructura vial, pero se encuentran en condiciones deplorables, ocasionando todo tipo de accidentes'.

El proyecto de ley fue radicado para esta nueva legislatura y se encuentra pendiente de ponencia de primer debate en la Comisión Sexta del Senado, con el fin de que este sea discutido.

Para Rubén Llanos, presidente del Comité No Peajes en el Atlántico, es apremiante que se haga una modificación a la Ley 1508 de 2012 que establece las concesiones 4G. Sostuvo que el Estado debe ser partícipe nuevamente de estos proyectos y ser garante de la movilidad de los colombianos.

'Si no está contemplado lo de las concesiones 4G y simplemente vamos a hacer peajes cada 150 kilómetros, por costos no creo que ese proyecto de ley pase en el Congreso', dijo.

El líder ciudadano precisó que si se amplía la distancia entre peajes se incrementarían los costos de la tarifa y tomaría mucho más tiempo la recuperación de la Tasa Interna de Retorno (TIR).

'Si se reduce el número de peajes, el tiempo para la recuperación de la inversión por parte del contratista sería más lenta. Eso elevaría los costos del impuesto'.

En el caso del Atlántico señaló que no se ven reflejadas las inversiones en las vías, pese a que hay peajes 'demasiado cerca y caros'.

'En el Atlántico estamos condenados a pagar por obras que ni siquiera benefician al departamento. Solo el proyecto de la autopista del Caribe tiene casi 300 km y nosotros tenemos los peajes en los últimos 15 a 20 km y estamos pagando por algo que no nos favorece'.

A su turno, Rafael Pérez, líder del sector El Morro en Tubará, se mostró de acuerdo con la propuesta del senador Fabián Díaz por el impacto que tendría en esa zona que cuenta con dos peajes.

'Soy un usuario permanente de las vías, me transporto todos los días desde El Morro hacia Barranquilla y pagamos una tarifa que no está acorde con el kilometraje que nosotros utilizamos. Si usamos de 20 a 22 kilómetros deberíamos tener una tarifa diferencial en los peajes, pero no la tenemos', aseguró.

De igual manera, expuso que las poblaciones del municipio y cercanas a este que viven del turismo se están viendo perjudicadas por los peajes.

Víctor Cantillo, experto en temas de movilidad, manifestó que la distancia entre peajes es una discusión 'irrelevante', toda vez que lo importante –según dijo– es modernizar la forma con la que pagamos por el uso de las vías, que debe ser según la distancia recorrida y utilizando tecnologías que eviten las largas filas en horas pico.

'Si se reduce el número de peajes lo que va a ocurrir es que los que finalmente queden tendrán un precio mayor. Por ejemplo, si entre Barranquilla y Ciénaga (donde actualmente hay dos peajes) se elimina uno de los dos, el precio del que finalmente quede será mayor para poder financiar el mantenimiento y mejoramiento de la vía', argumentó.

Señaló que para lograr la modernización del cobro cada vehículo debe estar equipado con un chip y en las vías tener detectores a lo largo del recorrido.

'Ya hay avances sobre la plataforma tecnológica, pero el proyecto ha sido pospuesto una y otra vez. Los beneficios son múltiples e incluyen ahorros en el recaudo (que será automático y no requiere las casetas que hoy existen), y en ahorro de tiempo de los usuarios, ya que no tienen que detenerse. En otras palabras, se tendrá circulación a flujo libre'.

Agregó que de llegarse a dar esta discusión, el montaje tecnológico deberá hacerlo el Ministerio de Transporte, a través de la ANI y el Invías, por medio de los concesionarios. El costo del chip que deberá tener cada automóvil –dijo– no supera los $20.000.

El ministro de Transporte, Guillermo Reyes, manifestó a EL HERALDO que se hará, de la mano con el Congreso de la República, una revisión a la política de peajes en el país.

Indicó que entre los temas a discutir y que se tratarán de resolver inicialmente son cuatro: las distancias entre los peajes; peajes que se quedaron congelados y no obstante las concesiones terminaron; peajes electrónicos que permitan que el vehículo no tenga que parar, sino que fluya y no se afecte al medio ambiente; y revisar la pertinencia de los peajes en determinadas vías.

Aclaró que si se eliminan peajes 'recurriremos a la plusvalía o la valorización, pero el peaje es componente fundamental del desarrollo y sirve también para el mantenimiento de las vías'.