Francisco ha sido expuesto públicamente dentro de un ataúd sencillo de madera, mientras que hasta Benedicto XVI los papas eran expuestos sobre un catafalco, pero Bergoglio cambió el protocolo.
Desde el martes por la mañana, cuando fue trasladado el cuerpo de Francisco hasta la basílica, más de 250.000 personas acudieron al Vaticano para rendirle homenaje, según la Santa Sede.
Los cerca de 220 cardenales presentes en Roma y que participarán en el funeral serán los primeros en visitar la tumba.
El arzobispo de Madrid se encuentra en Roma para participar del cónclave que elegirá al nuevo líder de la Iglesia Católica.
El exministro de Defensa Iván Velásquez, aunque recibió el beneplácito como nuevo embajador ante la Santa Sede, no asistirá a los actos debido a que no ha sido posesionado. El presidente Gustavo Petro no asistirá a las honras fúnebres.