Mientras las autoridades de Sincelejo le atribuyen a un corto circuito la quema dos kioscos escolares de la sede primaria del colegio ITI, en el barrio Santa María, algunos vecinos aseguran que esta fue una acción delictiva perpetrada por criminales.
En una visita realizada al plantel educativo en la mañana de este lunes se pudo constatar que el sistema eléctrico no estaba funcionando, que las palancas estaban abajo, lo que ratifica la versión de los pobladores de esa zona norte de la capital sucreña que en medio del miedo rechazan que hubiesen 'atentado contra la educación de los niños pobres'.