Ver y sostener a un bebé recién nacido por primera vez puede ser una experiencia inigualable y conmovedora. Mientras Catalina Redondo sostenía en sus brazos a su primogénito, no dejaba de asombrarse de la maravilla que había creado.
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Luego de nueve meses en su vientre, era consciente de que ahora llegaría un nuevo esfuerzo para que su crecimiento fuera saludable. Para ello, la alimentación cumplía un rol fundamental, empezando por la lactancia.
La leche materna es el alimento ideal para los bebés, ya que está diseñada específicamente para satisfacer todas sus necesidades nutricionales durante los primeros meses de vida, y esta práctica conmemora su Semana Mundial desde este martes hasta el próximo lunes 7 de agosto.
Pese a que Redondo sintió temor por creer no poder cumplir a cabalidad con esta práctica, afirmó que el llanto de su primogénito le dio valentía para empezar a amamantarlo.
'Tenía mucho miedo de que mi leche no estuviera en las mejores condiciones o que mis pezones estuvieran planos porque conozco casos de muchas madres que se les imposibilita esta acción'.
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La mejor protección
El factor protector más importante en el primer año de vida es la lactancia materna. Así lo hizo saber el pediatra y puericultor, Álvaro Duarte, quien explicó a EL HERALDO los beneficios de este proceso.
'Disminuye la cantidad de gripa, diarrea, alergias y posibilidad de obesidad. Tiene algunas sustancias bioactivas e inmunológicas que favorecen el buen desarrollo del bebé desde el punto de vista neurológico'.
Además, el especialista destacó que a través de esta práctica es posible reducir la contaminación que producen otras leches de carácter artificial.
'No hay nada que iguale la lactancia materna, para el bebé, además para la sociedad, porque la familia va a gastar menos dinero, va a haber menos contaminación ambiental, recordar que la leche materna es un recurso natural renovable y todo lo que se produce alrededor de la leche de fórmula, que es la leche artificial en polvo, que es de vaca, es muy grande la contaminación'.
Entre los beneficios a largo plazo también se ha relacionado con un mejor desarrollo cognitivo. Aspectos que destaca la especialista en nutrición infantil, Martha Hernández.
'Beneficia el coeficiente intelectual en los niños y algo que favorece y que hoy en día hablamos es de sus funciones a nivel del neurodesarrollo, porque la leche materna contiene unos ácidos grasos esenciales que van a favorecer las conexiones nerviosas a nivel de las neuronas'.
La lactancia materna debe proporcionarse de manera exclusiva durante los primeros seis meses de vida, es decir, sin dar absolutamente ningún otro alimento día y noche a libre demanda.
Sin embargo, esta etapa debe complementarse luego. Así lo indicó la docente de la facultad de nutrición y dietética de la Universidad del Atlántico, Yamile Herrera.
'Cuando hablamos de complementaria quiere decir que a partir de los seis meses la madre debe empezar a dar al niño otros alimentos diferentes a la lactancia materna. Después del primer año de vida hasta los dos años la madre debe ofrecer al niño primero los alimentos complementarios y posteriormente la leche materna. Esto para que el niño a los dos años sea capaz de dejar sin ningún trauma la lactancia materna y asumir la alimentación familiar con mucho más facilidad'.
Un vínculo estrecho
Cuando se amamanta, tanto la mamá como el bebé liberan oxitocina, la llamada 'hormona del amor' que afianza el vínculo de la díada. 'Se logra liberar oxitocina y es por eso que se producen todas las emociones positivas como es el caso de la ternura en esta etapa', dijo el pediatra y puericultor, Álvaro Duarte.
Catalina Redondo expresó la fortuna de haber vivido esta experiencia y envió un mensaje a todas las madres que aún no han dado lo que considera uno de los pasos fundamentales cuando se es mamá.
'Yo no cambio lo que he vivido ni siquiera por el mayor oro del mundo porque él es mi tesoro y todas las mamitas deberíamos comprenderlo así. Hay que amamantar. Es lo más bello que el universo nos puede dar'.
Bajos niveles en el Caribe
Según cifras del Ministerio de Salud, la Región Caribe es la que tiene los indicadores más bajos de lactancia materna exclusiva y total (36.1 %). Ante esto, la decana de la Facultad de Nutrición y Dietética de la Universidad del Atlántico, Aleyda Parra, explicó las estrategias que se adelantan en la institución para acelerar estas cifras.
'Es un proyecto que viene del Ministerio del 2018, en todas las instituciones públicas, privadas, en todas las instituciones y empresas también, que tienen que ver no solamente con educación, sino todo tipo de empresa, sobre la Sala Amiga de la Lactancia'.
Actualmente, adelantan un proyecto con la Facultad de Química y Farmacia con relación a la presencia de plomo en la leche materna.
La docente de la facultad de nutrición y dietética de la Universidad del Atlántico, Yamile Herrera, apoya este tipo de fechas para fomentar la importancia de esta práctica y que en el Caribe, las madres atiendan al llamado.
'Permiten fomentar la lactancia materna en las madres desde el contacto mismo con las comunidades respetando su cultura, respetando su idiosincrasia, haciéndolas ver como las mujeres como mujeres importantes dentro del proceso de desarrollo de sus niños, entonces la lactancia, la educación en lactancia materna se convierte en ese sentido en un pilar fundamental'.
