Debido a la zozobra y preocupación generada por la asistencia masiva de familiares y allegados al funeral en Tucurinca, Zona Bananera (Magdalena), del hombre de 76 años, víctima por la COVID-19, la Alcaldía Municipal conjuntamente con el Gobierno Departamental, han dispuesto de un control exhaustivo a la población.
Más del 60 por ciento de los habitantes del corregimiento zonero y otras personas de los municipios de Aracataca y El Retén participaron del sepelio, lo que ha generado mayor trabajo para las secretarias tanto municipal como departamental para poder identificar cuantas personas podrían estar contagiadas con el virus.
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'A la esposa se realizó la prueba, estamos esperando los resultados, de igual manera, el entorno familiar y varios allegados del fallecido por coronavirus están aislados. Le hemos suministrado los alimentados al igual que el resto de la población de Tucurinca. La Secretaria Departamental de Salud también tienen identificadas a algunas personas de El Reten y Aracataca que vinieron al funeral', manifestó Efraín Ortega, alcalde de Zona Bananera.
Además agregó que 'estamos en la búsqueda de más personas, ya que por ser un pueblo, todos se conocen, y por ende, asistió muchísima gente, por lo tanto no podemos bajar la guardia ante esta emergencia'.
El mandatario de los zoneros indicó que el grupo de jurídica de su gobierno en compañía de la Gobernación del Magdalena estudian un proceso penal contra la clínica General del Norte, en Barranquilla, que sin ningún protocolo entregó el cadáver de la víctima para que fuera trasladado hasta Tucurinca, donde se desarrollaron las honras fúnebres y hoy está la mencionada población en alerta.