La Procuraduría General de la Nación confirmó la sanción consistente en suspensión en el ejercicio del cargo e inhabilidad para el ejercicio de funciones públicas, por el mismo término, a Rafael González Rubio Natera, en su calidad de Contralor Distrital de Barranquilla, para la época de los hechos.
El ex contralor Distrital de Barranquilla fue investigado por omitir adelantar los trámites tendientes a solucionar la obligación originada en la sentencia judicial proferida por el Juzgado Tercero Laboral del Circuito de Barranquilla el 21 de octubre de 2003, dentro de un proceso de acción de reintegro por fuero sindical.
Con dicha omisión, se produjo un incremento de la obligación que inicialmente ascendía a 99 millones 468 mil 654 pesos, y, posteriormente, como producto del consecuente proceso ejecutivo, se cuantificó en la suma de 202 millones 645 mil 559 pesos.
Al resolver el recurso de apelación, el Procurador Segundo Delegado para la Vigilancia Administrativa, Fernando Brito Ruiz , mencionó Rubio Natera, desconoció la responsabilidad y los deberes que tenía atribuidos por la ley, adoptando un comportamiento omisivo, de forma consciente y voluntaria.
Mencionó que, para el caso particular, el entonces Contralor Distrital de Barranquilla debía demostrar, 'de manera fehaciente, que adelantó las gestiones requeridas, o que se presentó una situación de tal naturaleza, que le impidió atender la normatividad, lo que es este caso no acreditó.'
En atención a que el ex funcionario ya no ejerce funciones públicas, la Procuraduría convirtió la sanción en multa equivalente a 18 millones 313 mil 448 pesos, suma que deberá ser consignada a favor de la Contraloría Distrital de Barranquilla.
