Supongo que todos los conductores estarán de acuerdo acerca de la importancia de los semáforos para optimizar la movilidad de Barranquilla. Tengo cierto conocimiento sobre la materia porque en el año 1995 a mi extinta empresa RENO el Distrito le adjudicó un contrato para instalar semáforos en 17 cruces de la ciudad. Todos los equipos instalados, tanto los controladores electrónicos como los semáforos, eran producidos en Venezuela. Desde hace más de 20 años, la red semafórica local es operada por la Unión Temporal SDB Semáforos de Barranquilla. La información anterior es para poner en contexto a mis lectores y en esta columna expreso mi concepto personal; obviamente, cada conductor tendrá el suyo.
Lo primero sea aclarar que hoy solo analizo lo que aprecio en el área en que me desenvuelvo cotidianamente, y en mi opinión, los tiempos y las secuencias de algunos semáforos del norte de la ciudad están superdescuadrados, situación que genera demoras innecesarias y largas filas esperando la luz verde. Podría decirse que en algunas vías, en vez de la lógica “Ola Verde” hay una verdadera “Ola Roja”. Como ejemplo: Bajando por la carrera 52, si pasas en verde el semáforo de la calle 79, siempre llegarás en rojo a la calle 76, y cuando este de la 76 pasa a verde, llegarás en rojo a la calle 75, y cuando la 75 pasa a verde, llegarás en rojo a la 74, e igual sucederá con la 72. En ese corto tramo de 860 metros, que podría recorrerse en 1.5 minutos, se tarda más de 5 minutos aun sin tráfico. Situación que se repite en muchas vías más y solo requieren ser reprogramados los tiempos.
Otra situación que debería analizarse desde ya es la de nuevos cruces que requieren semáforos para generar vías de rápido desplazamiento y mayor seguridad; por ejemplo, de subida, para lograr una “Ola verde” en la carrera 57, se requiere con urgencia semáforos bien sincronizados en las calles 79, 85, 98 y 99, para complementar los ya existentes en las calles 82, 84 y 94. Así mismo, de bajada, en la carrera 58 con calle 98, que hay que atravesar con riesgo, creando también una “Ola Verde” sobre la calle 98 para no afectar su tráfico y facilitar el de las carreras que atraviesan esa calle. Urgente un semáforo en la carrera 55 con calle 79, escuadra que hay pasar, con muy alto riesgo, pudiendo lograrse en la calle 79 otra “Ola Verde” desde la carrera 46 hasta la 60, aprovechando los 3 carriles de esa vía ampliada recientemente.
Hay que aplaudir a los nuevos reguladores del tráfico, que con sus chalecos verdes hacen un buen trabajo reemplazando semáforos en algunos cruces conflictivos. También la operación tapa huecos del Distrito y las nuevas demarcaciones de calzadas, lo cual, además de lograr definir muy bien cada carril y con esto organizar el tráfico, mejora el aspecto urbano de Barranquilla.
@nicorenowitzky