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Hablar durante el sueño ha sido motivo de curiosidad desde tiempos antiguos. Lo que para algunas personas puede ser una anécdota graciosa o un rasgo peculiar en la vida en pareja, para los especialistas representa un campo todavía en exploración dentro de los estudios del sueño. Se trata de la somniloquia, una parasomnia que puede presentarse de forma esporádica o persistente, y que en algunos casos podría estar relacionada con otros trastornos neurológicos o del sueño.

Samuel Morillo, neuropsicólogo especializado en trastornos del sueño y director del Instituto de Neurociencia del Sueño (INS) en Bogotá, explica que la somniloquia se manifiesta cuando una persona habla dormida sin tener consciencia de ello. Puede expresarse como murmullos, frases sin sentido, gritos o palabras con carga emocional, sin que exista control sobre lo que se dice.

Un estudio publicado en 2023 por el Journal of Sleep Research reveló que hasta el 66 % de las personas ha hablado dormida al menos una vez en la vida, aunque solo entre un 5 % y 10 % lo hace con regularidad. La investigación, desarrollada por la Universidad de Lyon junto con diversos centros europeos, registró durante un mes completo las grabaciones nocturnas de más de 300 personas.

Entre los hallazgos, se encontró que cerca del 59 % de las expresiones emitidas dormido eran ininteligibles; el 21 %, frases relacionadas con actividades cotidianas; y el 7 %, expresiones con lenguaje ofensivo o agresivo.

Morillo explica que estos episodios ocurren con mayor frecuencia durante el sueño no REM, particularmente en su fase más profunda (N3). Durante este estado, el cuerpo está completamente relajado, pero ciertas áreas cerebrales —como las que controlan el lenguaje— pueden activarse de manera aislada, provocando que la persona hable sin despertar.

Contrario a lo que se cree, el contenido verbal emitido durante estos episodios no siempre está relacionado con los sueños. En palabras del especialista: “Muchas veces, lo que se dice durante la somniloquia no tiene sentido o no tiene conexión alguna con los sueños. Pueden ser frases sueltas, palabras inventadas, insultos, risas o gritos. Pero también hay casos en que las palabras parecen seguir un hilo lógico. Lo que es claro es que la persona no tiene control alguno sobre lo que dice”.

La somniloquia es más común en la infancia y, en muchos casos, desaparece con la edad. Sin embargo, hay adultos que continúan presentándola sin saberlo, hasta que alguien cercano se lo señala. En ocasiones, esta conducta viene acompañada de otras manifestaciones nocturnas como caminar dormido, levantarse bruscamente o episodios de terror nocturno. En esos casos, podría tratarse de un síntoma de un trastorno del sueño más complejo.

“El habla durante el sueño puede ser un síntoma secundario de trastornos como el trastorno de conducta del sueño REM, epilepsia nocturna o incluso estrés postraumático. Por eso, si una persona experimenta somniloquia constante y, además, muestra comportamientos violentos o confusión al despertar, debe consultar con un especialista en sueño”, advierte Morillo.

Factores que pueden detonar la somniloquia y sus implicaciones

Varios factores pueden detonar episodios de somniloquia. El especialista menciona el estrés, la fiebre, el consumo de alcohol o drogas, la falta de sueño y la predisposición genética como algunos de los más frecuentes. En algunos hogares, se han documentado varios miembros con este patrón, lo que sugiere una posible herencia.

Más allá de su aspecto clínico, la somniloquia puede tener implicaciones en la vida social o de pareja. Algunas personas se sienten incómodas o avergonzadas al enterarse de que hablan dormidas, sobre todo si el contenido de lo que dicen resulta confuso o compromete emocionalmente.

“Una mujer me contó que, durante dos años, creyó que su esposo tenía conversaciones con alguien más por teléfono, hasta que descubrió que simplemente hablaba dormido”, relata Morillo.

El neuropsicólogo recomienda no sacar conclusiones apresuradas ante lo que se dice en medio del sueño. “Hay quienes dicen el nombre de una expareja dormidos. Mi consejo: no saquen conclusiones apresuradas. Dormidos, todos podemos ser actores de teatro sin guion”, comenta.

¿Hay cura para la somnoliquia?

El tratamiento de la somniloquia se aplica solo si el fenómeno interfiere con la calidad del descanso o la convivencia. En esos casos, se prioriza la higiene del sueño: mantener horarios regulares, evitar pantallas antes de dormir, reducir el consumo de sustancias estimulantes y procurar un ambiente tranquilo. En ocasiones, se utilizan grabaciones nocturnas o terapias conductuales para comprender mejor el patrón.

Aunque se conoce desde hace siglos, la somniloquia sigue siendo objeto de estudio. La investigación dirigida por la Universidad de Lyon continúa en una segunda fase, esta vez enfocada en analizar si los patrones lingüísticos que se manifiestan durante el sueño tienen alguna relación con la forma en que las personas se expresan mientras están despiertas.

Según Morillo, esto podría aportar nuevos elementos para comprender el funcionamiento del lenguaje en el cerebro humano.