“Vivimos el infierno de estar contagiados todos en casa”: hija de barranquillero muerto por COVID-19 en Ecuador
"Ahora somos seis las personas contagiadas en casa. No hay medicamentos, no hay comida y no voy a permitir que se me agraven sin poder hacer nada”, dijo Laura Scandon Rodríguez a EL HERALDO.
La pesadilla para la familia barranquillera Scandon Rodríguez continúa en Guayaquil, Ecuador. Al dolor por la pérdida de Johnny Scandon Mojica, se suma ahora el contagio de seis integrantes del hogar. En diálogo con EL HERALDO, Laura, -quien días atrás clamaba ayuda para su padre-, narró la crítica situación que se vive en ese país, donde según ella no hay medicamentos ni comida.
“Ahora estamos con el infierno de que todos en mi casa, los seis, somos positivos para COVID-19. Ayer (domingo) me hice la tomografía de mis pulmones y gracias a Dios están limpios, no tengo sintomatología pero hoy amanecí con un poco de tos, aunque el doctor me dice que puede que mi caso sea de los que se curan”, contó la joven que lleva 12 años viviendo en la República de Ecuador.
De acuerdo a lo expresado por la barranquillera, su mamá de 63 años y su hermana de 39, no corren con la misma suerte. “Ellas si tienen afectados los pulmones, es algo leve pero hay que tratarse. Esto es un virus muy agresivo y tengo que actuar rápido. Necesitamos que un neumólogo esté monitoreándolas, aquí no hay medicamentos, necesitamos comida porque tienen que alimentarse bien y aquí no tengo nada. No voy a permitir que se me agraven en la casa sin poder hacer nada”, expresó desesperada.
Y es que la preocupación radica en que sus familiares presentan antecedentes médicos. “Mi hermana se realizó el baipás y tiene más tendencia a complicarse porque no se alimentaba muy bien, y mi mamá es asmática”, confirmó la barranquillera, quien también contó que tiene 15 días sin ver a sus hijos.
“Mis hijos están sanos, confío en Dios que ellos están bien. Tengo dos semanas que no los veo. Me he olvidado que tengo hijos porque no quiero deprimirme. Esta enfermedad funciona con la depresión y en estos momentos mis energías están para mi mamá y para mi hermana que son lo único que tengo”, dijo.
Agregó que su esposo y hermano “se harán hoy las tomografías para ver las condiciones en las que se encuentran sus pulmones. Las muestras son súper costosas, cada una cuesta 150 dólares”.
Repatriación del cuerpo de su padre, un asunto “imposible”
Los esfuerzos que como hija hizo para salvar a su padre no fueron suficientes y Johnny Scandon murió el pasado sábado sin que ninguna autoridad se hubiese contactado con ella para tenderle la mano en esos momentos de dificultad.
“Mi papá se murió aquí, todavía ni lo entierro, me costó muchísimo que vinieran por él. Este país está destruido por completo, no recibo ayuda para que nos repatrien a nosotros que estamos vivos, mucho menos con mi papá muerto”, aseguró Scandon, quien con evidente tristeza expresó que “tendremos tiempo más adelante de llorarlo, en estos momentos nos enfermamos más”.
