Las autoridades de Texas afirmaron que se mantienen en máxima alerta mientras observan de cerca a la decena de personas que tuvieron contacto directo con el liberiano Thomas Eric Duncan, el primer paciente con ébola diagnosticado en EEUU, y cuya condición empeoró ayer de manera drástica.
David Lakey, comisionado del Departamento de Salud de Texas, dijo en teleconferencia que: 'Queremos que los hospitales aquí en Texas, y en todo Estados Unidos, se mantengan en alerta máxima para identificar a pacientes que puedan tener síntomas consistentes con el ébola y que puedan haber estado recientemente en los países afectados'.
En una rueda de prensa conjunta, el director de los Centros de Control y Enfermedades (CDC), Thomas Frieden, señaló que de las diez personas con mayor riesgo de contagio siete son parte del personal médico que atendió a Duncan y tres de su entorno familiar.
El juez Clay Lewis Jenkins, a cargo de la emergencia en Texas, confirmó que efectivos policiales locales hallaron y colocaron en observación a una persona con bajo riesgo de contagio, para determinar si tuvo un contacto directo con Duncan.
NBC confirmó que Ashoka Mukpo, el camarógrafo colaborador de esta cadena y que fue diagnosticado con ébola en Liberia, fue llevado en un avión ambulancia a un hospital en Omaha (Nebraska). Efe