Compartir:

Colombia superó el medio millón de vendedores ambulantes. Así lo dio a conocer el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (Dane), en el que se contó un total de 507.266 personas que trabajan en esta condición, lo que representa el 2,6 % de los trabajadores en Colombia.

Según la entidad, este número, que es el reportado en 2024, significó un aumento del 5,3 % si se compara con el dato de 2023 cuando había 481.655 personas trabajando como vendedores ambulantes.

El informe data que esta es una actividad donde el trabajo por cuenta propia salta a la vista, pues esa es una realidad en el 97,2 %. Tan solo en un 2,8 % las personas trabajan como patrones o empleadores.

Lo anterior está relacionado con los altos niveles de informalidad, es decir, trabajadores que no cotizan a salud, pensión, riesgos laborales y caja de compensación familiar, entre otras prestaciones.

El Dane reveló que, de los 507.266 vendedores ambulantes que había en Colombia en 2024, el 60,4 % eran hombres y 39,6 % mujeres.

Estos micronegocios de vendedores ambulantes son distribuidos de la siguiente manera: 45,9 % comercio; 34,2 % servicios; 11,6 % industria manufacturera; y 8,2 % agricultura, ganadería, silvicultura y pesca.

Los mayores crecimientos de vendedores ambulantes se presentaron en los sectores de agricultura, ganadería, silvicultura y pesca con 41,1 % e industria manufacturera con 13,5 %, por su parte servicios decreció en 0,7 %.

En 2024 y a nivel nacional, el 58,2 % de micronegocios de vendedores ambulantes fueron creados porque su propietario(a) no tenía otra alternativa de ingresos; el 26,2 % lo identificó como una oportunidad de negocio en el mercado; 5,9 % lo hizo para complementar el ingreso familiar o mejorar el ingreso; 4,8 % por tradición familiar o lo heredó; el 2,6 % no tenía la experiencia requerida, la escolaridad o capacitación para un empleo o por otro motivo; el 1,8 % para ejercer su oficio, carrera o profesión.

Además, estos vendedores ambulantes señalaron que, en un 59,8 % de los casos, su principal fuente de recursos para la creación o constitución del negocio fueron ahorros personales; el 16,9 % no requirió financiación; el 12,3 % solicitó préstamos a familiares; el 6,7 % recurrió a prestamistas y solo el 2,8% accedió a préstamos bancarios. El 1,5 % no sabe o usó otra fuente de financiamiento.