El sueño se ha convertido en una pesadilla. Jesús Marimón Báez llegó el 5 de marzo a Montevideo, Uruguay, con la ilusión de seguir su carrera futbolística en el equipo El Progreso. Entrenó dos semanas y cuando estaba listo para sellar su vinculación al conjunto charrúa, la COVID-19 le puso freno a ese deseo.
Marimón, nacido en María La Baja, Bolívar, pero formado deportivamente en el Cesar, asegura que está viviendo momentos 'difíciles' pues se encuentra solo y lejos de su familia, por eso pide que le ayuden a conseguir un vuelo humanitario para retornar a Valledupar y así estar cerca de sus seres queridos, quienes están preocupados por la situación que vive en un país extraño en medio de la pandemia del coronavirus.
'Llegué con la idea de firmar acá en un equipo, no se da después de dos semanas debido al Covid-19. Se cerraron las fronteras y desde ese momento estoy encerrado, solo aquí en una casa en Uruguay lejos de mi familia, sin oportunidad de saber cuándo podré regresar porque no hay posibilidades de aviones. Estoy en una situación bastante crítica porque el dinero ya empieza a escasear. Saber que no puedo estar con mi familia es muy difícil. Levantarme todos los días y no ver a nadie es muy duro. Solo hablo con ellos por teléfono y video llamadas', cuenta con algo de nostalgia Jesús, quien antes de marcharse a Uruguay estaba jugando en Patriotas.
Marimón Báez, de 21 años, está viviendo en casa de uno de los empresarios que lo llevó a Uruguay. También considera que lo han dejado solo en medio de toda esta dura situación.
'El que me iba a corresponder con mis cosas era el empresario hasta el 31 de mayo. Estoy en unas condiciones difíciles porque estoy totalmente solo. Estoy justo en la casa de uno de los dos empresarios que me trajo, esperando para ver cuando me puedo ir . La idea era jugar con ellos tres meses hasta el 31 de mayo y volver a Colombia, pero no esperaba todo este tema del virus. En ese periodo el empresario que me trajo iba a sostenerme', agregó el futbolista que también militó en el Once Caldas.
Marimón asegura que ha pedido ayuda a las autoridades colombianas que están en Uruguay, pero se decepcionó cuando conoció la respuesta que le dieron.
'Hablé con el consulado de aquí y me dicen que por el momento no tienen solución, mejor dicho: también estoy con incertidumbre. Yo lo que pido es un vuelo humanitario para regresar a Colombia y estar otra vez con mi familia', indicó el jugador.
Pese a que está viviendo momentos complicados, Jesús ve un panorama más alentador en Uruguay con respecto al coronavirus. 'Aquí la situación es manejable porque el país es pequeño, creo que hay como unos 600 casos y la mayoría se han recuperado, se han muerto 18. Ya están saliendo del confinamiento. No es tan desastroso. La gente en la calle sale con el tapabocas y se controla bien la situación', apuntó.
Insiste en que el dinero se le está acabando por eso desea una solución pronta para no vivir más angustias. 'Ya me queda poco dinero, me quedan 3 mil pesos uruguayos (267 mil pesos colombianos) para vivir. Estoy en las últimas, espero que me ayuden porque no sé hasta dónde me dure esa plata', cerró el futbolista.