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Si es zurdo y porta la ‘10’ se piensa inmediatamente en un jugador exquisito. Esnéider Castellar no es la excepción a la regla. El melenudo magdalenense, nacido en El Retén, pero representante del equipo Real Sociedad de Aracataca (categoría 2006), impresiona con su capacidad de visión y sus pases al vacío en el Torneo Asefal que tiene como una de sus sedes, el estadio Moderno.

Es diferente, sabe leer el fútbol. Mientras otros niños caen en el desespero al tener la redonda en sus pies, Esnéider toma un respiro, levanta la cabeza y elige al mejor compañero ubicado. Está aún en proceso, como todo infante comete errores, a veces abusa del manejo del útil, pero nadie puede negar que en el futuro puede llegar al profesionalismo.

Rafael Vargas, entrenador y orgulloso residente de la tierra del Nobel Gabriel García Márquez, sabe que en sus manos tiene un diamante que brillará en su madurez si lo saben pulir. Vargas, como muchos otros timoneles, dejó seducir sus pupilas por la calidad del ‘10’ y de inmediato habló con Clemente, el padre del menor, para impulsar poco a poco su carrera.

'‘Caste’, como le decimos, es de El Retén, Magdalena. Lo vi jugando en un torneo en Aracataca, tenía nueve añitos y le dije al papá que lo necesitaba. Tiene una capacidad técnica increíble y es un jugador que cuando toma la pelota sabe dónde la va a tirar, al espacio. Te juega de lateral izquierdo, extremo por izquierda, volante de primera línea, de diez. Es un monstruo, el ‘mounstrico’ le decimos acá. Es un jugador que se nota. Es un niño que está conmigo hace tres años. También viene de la pony fútbol, viene con ese proceso. Ahí lo llevamos, primero que todo queremos que sea persona, su talento lo ve todo el mundo, pero lo personal no se puede ver a simple vista y estamos trabajando en eso siempre. Este equipo viene de ser campeón en el Magdalena y él es una de nuestras figuras', expresó Vargas.

Observando atentamente los elogios de su orientador está Esnéider. Ayer el resultado no fue el deseado y cayeron derrotados 2-0 ante Colombia Sports, rival que por talla, mas no por fútbol, los superó ampliamente. Sin embargo, Esnéider cree que pueden avanzar de ronda y por qué no, pelear por el título.

'Me siento bien. Ya he participado dos veces en el Torneo Asefal. La vez pasada llegamos hasta los octavos de final, pero ahora queremos llegar más adelante. Debemos concentrarnos más y hacer más pases', manifiesta el pequeño futbolista que intenta doblegar la timidez con una sonrisa cuando sus compañeros lo miran fijamente al dar declaraciones.

Nació el 4 de octubre de 2006. Hijo de Clemente Castellar y Evanis Hurtado. Tiene metas claras, tan claras como sus letales paredes.

'Quiero jugar un Mundial con la selección Colombia y jugar en el Barcelona. Soy fan de Messi por la zurda. Quiero sacar a mi familia adelante', expresa Esnéider, quien se declaró, sin titubeos, como hincha del Junior.