Es preciso activar las narrativas y agendas públicas sobre las masculinidades corresponsables, las deconstrucciones patriarcales y la apuesta de los hombres para aportar a una vida en equidad e igualdad de derechos, desde las mapaternidades, el arte y la sensibilidad que lo distancia de actos violentos y que los salva de la histórica condena de mandatos machistas.
No se trata de negar las crudas realidades, de los índices de violencias basadas en género, los feminicidios y las brechas sociales que existen, sino de construir procesos que inviten a cambios, que visibilicen temas que han sido normalizados y silenciados, que perdamos el miedo como sociedad a generar reflexiones profundas y de confrontación, es momento de la transformación social con perspectiva de género y de manera especial enfocada en la garantía de los derechos humanos femeninos y esto no se hace de mujeres a mujeres, sino con la inclusión de todos y todas – hombres y diversidades sexuales, un tejido incluyente que revolucione y agite cambios contundentes, que enmarque la vida en la garantía de los derechos, en la equidad e igualdad con un ingrediente transversal de no violencia.
Por esta razón, afirmo que los temas de género o derechos femeninos no son un asunto exclusivamente de las mujeres, sino también de los hombres, de la humanidad como tal. De esta manera, las masculinidades son fundamentales para avanzar en la construcción de una nueva sociedad, equitativa, igualitaria y sin violencias; esto no se puede considerar una utopía y seguir en la resignación de que nada va a cambiar o que solo las mujeres tienen la misión de erradicar el machismo, es momento de reconocer que las estructuras patriarcales nos afectan a todos y todas.
Por ello es fundamental que se comience a percibir el tema de la inequidad e igualdad de género como un asunto público, es decir, un problema político y cultural. Es pertinente que se implementen políticas públicas, procesos académicos, iniciativas sociales, es decir, desde todos los ámbitos (institucionales, académicos o ciudadanos), para que en la agenda pública se consoliden procesos que desmitifiquen paradigmas patriarcales que impiden el logro de la igualdad de derechos.
De esta manera, celebro iniciativas como las del foro virtual – Masculinidades tejedoras de nuevas realidades: desmitificando el patriarcado - organizado por la asociación Evas&Adanes en alianza con la Universidad Autónoma de Occidente en el marco del mes del padre, el cual, permite dialogar de manera transparente y visionaria desde las voces de hombres que son padres, bailarines, poetas y gestores de cambios que han aprendido a sanar herencias machistas y a hacer pactos de amor y sin miedo se han atrevido a desaprender y reinventarse; como ellos hay muchos y se espera que no sean la excepción de la regla sino lo cotidiano, que no nos sorprendan las masculinidades corresponsables sino que sean la bonita – normalidad – gracias Keiner, Marco, Guillermo, Víctor y Freddy por ser tejedores de nuevas realidades y ser la esencia de foros tan inspiradores como este, que poderosa forma de crear y transformar – ese es el camino – polinizar al mundo #AmarEsUrgente