Cuando el Profesor Hernán Vélez, autor de unos de los libros más importantes Fundamentos de Medicina, regresó de Inglaterra, a la Universidad de Antioquia, como uno de los primeros Internistas especializados en Nutrición, nos enseñaba que una parte de la solución a los altos índices de desnutrición sería que los adultos teníamos que dejar de tomar leche para poder alimentar y salvar a un gran número de niños desnutridos, sus estudiantes quedamos sorprendidos. Tenía razón el profesor Vélez, el daño por déficit nutricional es irreversible, teniendo en cuenta su variable deficiencia, no solo en cantidad, sino en la calidad de los alimentos.
Una de las grandes deudas de la humanidad con las mujeres, es la alimentación materna, con lo cual se han salvado millones de niños. El permanente crecimiento de fallecimientos, ocasionados o asociados a la desnutrición, 2. 8 millones de niños mueren cada año en el mundo (Unicef, 2023), y según el DANE, 377 niños menores de cinco años, murieron en Colombia (2023). En Gaza, 16% de los niños, sufren actualmente desnutrición aguda (OMS), la que deja. más daños irreparables, el 90 % de los niños y el 95 % de embarazadas y lactantes, están en situación de carencia alimentaria extrema.
Pero, si el apoyo de la mujer para la vitalidad de los niños ha sido importante, otros reconocimientos no son menores. Tienen el gran privilegio de la maternidad, y con ella, la enseñanza y educación de los hijos, la mayor responsabilidad de los hogares, y, además, una gran participación en todos los niveles, estamentos, instituciones, políticas, culturales, científicas, y en general, en todas las actividades, que promueven, el desarrollo y el crecimiento de las comunidades en todo el universo.
Al lado de esa gran representación mundial de las mujeres, que ha tenido tan enormes repercusiones en el desarrollo de la vida, desde el crecimiento y desarrollo de los niños, y el manejo de la responsabilidad en los hogares, existe, una gran diferencia de beneficios entre los dos géneros con una enorme desigualdad histórica en favor de un machismo, que, gracias a la lucha permanente, sostenida y hasta heroica, del género femenino, viene disminuyendo cada día.
En la lucha por el reconocimiento, en la igualdad de los derechos de género se viene logrando un cambio, que, aunque todavía le falta mucho, apoyada por los grandes componentes del Estado, en donde el gobierno y la sociedad civil, ha reconocido legalmente los derechos de igualdad de géneros, debemos continuar con el apoyo al cumplimiento de la ley en la mejoría rápida de los derechos que, aunque existentes, no se cumplen.
Por otro lado, se debe prestar mayor atención, en el apoyo a la corrección en la falta de protección, y de la defensa a los derechos fundamentales de la mujer, como el derecho a la vida, añadiendo un programa estructurado, con el apoyo de expertos, que den como resultado la erradicación del número inverosímil de delitos contra las mujeres. Este, sería un buen regalo en su día.