La secretaría de Ambiente de Bogotá sacrificó a los 40 animales marinos que habían sido incautados el pasado martes de una exhibición en el centro comercial Atlantis de la capital.
Las especies incautadas por 'la tenencia ilegal y exhibición de fauna silvestre' fueron trasladadas al Centro de Flora y Fauna Silvestre después de que un ciudadano alertara sobre la presencia de un tiburón bambú encerrado en un espacio pequeño dentro de una atracción del centro comercial.
La entidad aseguró en un comunicado que 'se vio en la obligación de proceder al sacrificio de dichas especies', debido a los 'enormes riesgos que tienen para los ecosistemas locales la presencia de especies exóticas' como son lo han sido los casos del pez león, la rana toro y el caracol africano.
Los animales habrían sido traídos ilegalmente del Océano Índico, las Islas Fiji, China y Australia, según detalló la entidad.
La secretaria de Ambiente enfatizó en que 'no se puede desconocer el impacto que puede llegar a generar el ingreso al país de especímenes exóticas. Se amenaza la biodiversidad y la conservación de los ecosistemas, aparte de que estas especies pueden introducir enfermedades y parásitos a las especies nativas'.
Precisaron que estos animales foráneos se comportan principalmente como depredadores, alterando el equilibrio biológico del ecosistema.
Esta no es la primera vez que la Secretaria de Ambiente sacrifica a especies rescatadas, en 2011 se sacrificaron 830 especímenes, 236 en 2012; 205 en 2013; 120 en 2014; 278 en 2015; y 183 en 2016; para un total de 1.892 especies sacrificadas influyendo a los 40 del Atlantis.
Conservación Internacional, una organización dedicada a la conservación de la diversidad biológica en el planeta, habló sobre el caso y advirtió que se trata de animales potencialmente invasores y los considera una de las mayores amenazas a la biodiversidad de nuestro país.





















