
Fuera de control la terminal pirata en Soledad sobre la 30
Los usuarios de la vía aseguran que falta de control en la zona del puente del Inem para que evitar que los carros y buses taponen un carril.
Sincelejo, Carmen de Bolívar, Suan, Calamar, se escuchar gritar a varios “ayudantes” de los buses intermunicipales que se estacionan la mañana del viernes debajo del puente del Inem, justo frente al colegio Itida, en Soledad.
Son unos 20 automotores, entre particulares, buses y vehículos tipo van los que permanecen estacionados en uno de los carriles de la calzada de la calle 30 que va hacia el aeropuerto Ernesto Cortissoz.
En ese momento, a las 9:30 de la mañana, el caos era evidente. El ruido, los gases que salían de los mofles de los carros y el trancón, provocaban desorden y afectaba la movilidad.
“Eso es de todos los días. Aquí llega mucha gente, para viajar. Aquí acostumbro a coger el bus, porque los pasajes son mucho más baratos”, manifestó un Johan Vergara antes de abordar un vehículo que lo llevaría a su destino, en El Carmen de Bolívar.
Otro usuario, que prefirió no identificarse, dijo que el caos en ese sector de la calle 30 “es el pan de cada día” para los soledeños.
Según afirmó, todos los días, especialmente en las horas pico, el estacionamiento de los vehículo afecta la movilidad de la vía que conecta a Barranquilla con Soledad y el aeropuerto Ernesto Cortissoz.
El problema, de acuerdo con el ciudadano, radica en que las autoridades de tránsito no ejercen control en la zona, para evitar que los carros continúen estacionándose sobre la vía y que siga funcionando una terminal ilegal en ese punto de la calle 30.
Aunque el ciudadano advierte que el problema no es de ahora, sostiene que el actual gobierno de Soledad debe actuar de “inmediato” para frenar la actividad “ilegal”, que impacta directamente la Terminal de Transporte de Barranquilla.
Según datos que ha manejado esa entidad, las terminales ilegales se llevan entre el 40% y el 50% de los pasajeros que salen del área metropolitana de Barranquilla.

Otros problemas
Al caos en la movilidad se suman los problemas de seguridad que se pueden generar para la comunidad educativa del colegio Itida.
Un padre de familia de la institución educativa advirtió que en la zona permanecen muchas personas que se convierten un factor de riesgo para los menores de edad.
El acudiente se refiere a los numerosos vendedores ambulantes que caminan entre los carros par ofrecer los productos y llegan hasta la puerta del colegio.
También alerta sobre el riesgo que representa para los menores la cantidad de pasajeros que llegan hasta el puente del Inem para abordar los vehículos.
“Es necesario que se ponga fin, de una vez por todas, a este problema. Los padres nos hemos quejado sobre esta problemática, pero nunca hemos sido escuchados”, manifestó el padre de familia.
Finalmente, aseguró que es necesario que el Instituto de Tránsito de Soledad actúe frente a esta problemática.