Ante la persistente afectación del servicio de acueducto regional que abastece a los municipios de Manatí y Candelaria, así como a las poblaciones de Carreto y Leña, la empresa AQsur encabezó una mesa de trabajo con representantes de la empresa de energía Air-e, la Gobernación del Atlántico y la Asociación Regional del Sur (Aresur), con el propósito de encontrar soluciones a las fallas eléctricas que comprometen el funcionamiento del sistema de bombeo.
Desde el pasado 12 de junio, variaciones de voltaje en el punto de captación ubicado sobre el Canal del Dique han impedido la operación nocturna del sistema, reduciendo su capacidad de almacenamiento y distribución de agua potable. Esta situación ha generado afectaciones directas a miles de usuarios en la zona.
Durante el encuentro, AQsur insistió en la necesidad de una intervención técnica urgente para estabilizar el suministro eléctrico, condición indispensable para garantizar la continuidad del servicio. La Gobernación del Atlántico expresó su respaldo a las acciones conjuntas y manifestó su disposición para apoyar la gestión interinstitucional que permita una solución definitiva.
En paralelo, AQsur continúa implementando un plan de contingencia que incluye el envío de carrotanques con el apoyo de la Unidad Nacional para la Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), mientras se adelantan las correcciones estructurales por parte del operador eléctrico.
“La coordinación entre los actores es clave para superar esta emergencia y restablecer plenamente el servicio de agua. Desde AQsur reafirmamos nuestro compromiso con las comunidades afectadas y seguiremos trabajando hasta lograr una solución sostenible”, indicó la entidad.
El trabajo conjunto busca mitigar los impactos actuales y evitar que situaciones similares se repitan en el futuro cercano.
