Durante tres días, miles de personas desfilaron por la basílica vaticana para despedirse brevemente de Francisco.
El cortejo de Francisco, que supone uno de los mayores retos a nivel organizativo para las autoridades italianas.
Aunque inicialmente se había confirmado que la delegación del país que iba a el Vaticano estaba conformada solo por la canciller Sarabia y la primera dama Verónica Alcocer, desde la Casa de Nariño dieron a conocer del viaje del mandatario.
La Protección Civil italiana prevé que este número seguirá aumentando considerablemente en las próximas hora
Todo el mundo en Roma quiere despedirse del sumo pontífice, ya fallecido.