La Corporación Autónoma Regional del Valle del Cauca explicó que la razón de ver estas especies en las costas del Pacífico colombiano se debería algunos cambios climáticos en áreas marinas.
El reptil cuenta con una licencia para brindar apoyo emocional tras mostrar una personalidad despreocupada y no agresiva con las personas.
Los ciudadanos se han quejado porque el animal no solo descansa en sus embarcaciones, sino que también los hunde por su peso.
La subespecie de raya gigante que fue capturada en la parte camboyana del río Mekong mide 4 metros de longitud y pesa 300 kilogramos.
Vivir pensando que valemos más que los animales no es sino una penosa muestra de falta de raciocinio. Y en ese mismo sentido, asumir que tenemos prioridad por encima de ellos y que eso nos da potestad para tratarlos peor que a una cosa inerte es un claro asomo de nuestro pasado más primitivo.