Preocuparse por la salud del corazón dejó de ser un tema ligado solo a los adultos. Pensar que los jóvenes no pueden padecer este tipo de afecciones se ha convertido en un mito, incluso en niños, ya que, según el Royal Children’s Hospital de Melbourne, uno de cada cien niños sufre un problema cardíaco, por lo que ya dejó de ser una consecuencia de la edad avanzada para denominarse como un asunto que puede atacar a todos.
Los defectos cardíacos congénitos son anomalías en la estructura y el funcionamiento normal del corazón que modifican el modo en que la sangre pasa por este órgano y por el resto del cuerpo. Cabe recordar que las enfermedades cardiovasculares son las más mortíferas del mundo, cobrando 17,3 millones de vidas anualmente.
En un reciente estudio realizado por el laboratorio se encuentra que las condiciones de salud relacionadas con el corazón tienen una prevalencia similar en todos los grupos etarios. Los resultados indican que la prevalencia de afecciones cardíacas solo difiere entre generaciones en un 10%, con Baby Boomers (de 58 años o más) reportando 23 %, Generación X (de 42 a 57) 17 %, Millennials (de 26 a 41) 13 % y Generación Z (de 18 a 25) 15 %.
Hay un 15 % de los jóvenes entre 18 y 25 año potencialmente viviendo con una condición cardíaca, lo que significa que alrededor de 1, de cada 6 de ellos, están en riesgo.
¿Cómo percibir las alertas?
El estudio también arrojó que el 60 % de las personas que experimentaron síntomas de afecciones cardíacas no sintieron que fueran lo suficientemente graves como para buscar tratamiento médico. Pero entre ese grupo, el 41 % tenía una condición relacionada con el corazón.
Sin embargo, para el Director Científico e Investigador Clínico, Álvaro Rojas, es fundamental aprender a escuchar las necesidades del corazón y asistir a un centro médico cuando empiecen a presentarse ciertos síntomas.
'Se necesita buscar atención médica cuando se presente dolor de pecho, dificultad para respirar, desmayo, ritmo cardíaco acelerado o lento, latidos irregulares, pies, piernas, tobillos, estómago o manos hinchadas, dolor en el cuello, la mandíbula, la garganta, la parte superior del abdomen o la espalda'.
Uno de esos síntomas lo sintió en gran medida, Ángel Escudero el 17 de octubre de 2019, a sus 23 años cuando un fuerte dolor en el pecho le ocasionó un infarto de miocardio, ocasionado por una acumulación de grasa, colesterol u otras sustancias en las arterias del corazón.
Desde sus 16 años, Ángel inició un alto consumo de tabaco que tuvo sus repercusiones solo un par de años después.
'De niño siempre tuve mucha ansiedad y a esa edad solo me daban ganas de fumar, sentía que me relajaba. A veces sí sentía que me palpitaba el corazón de una manera descontrolada, pero nunca le presté atención'.
Desde ese día, la vida de Ángel empezó a tener un cambio rotundo. Las visitas al médico aumentaron y los buenos hábitos empezaron a ser protagonistas en la nueva etapa que debía afrontar.
'Debo reconocer que vivo con miedo de que me vuelva a pasar porque estoy propenso a eso. Pero he seguido las recomendaciones del médico. Incluso, entré a terapia para dejar el tabaco y lo pude controlar'.
{"titulo":"¿Llega tarde a todos lados? Podría padecer una condición psicológica","enlace":"https://www.elheraldo.co/salud/el-sindrome-de-la-demora-cronica-la-condicion-psicologica-que-hace-que-una-persona-llegue"}
¿Por qué se produce?
De acuerdo al internista cardiológo, Germán Pérez, entre sus posibles causas resaltan las enfermedades cardíacas congénitas.
'Algunos pacientes pueden nacer con problemas en su corazón que pueden aumentar el riesgo de sufrir un infarto de miocardio a una edad temprana. Hay actores de riesgo modificables como ciertos hábitos y estilos de vida, como fumar, tener una dieta poco saludable, no hacer suficiente ejercicio y tener un alto nivel de estrés'.
Las enfermedades autoinmunitaria, como la artritis reumatoide y el lupus, pueden aumentar el riesgo de infarto de miocardio en pacientes jóvenes.
Deportistas, también víctimas
Aunque los deportistas suelen tener una buena salud cardiovascular gracias a su estilo de vida activo, no están exentos de sufrir un infarto de miocardio. El especialista expuso las siguientes razones:
'Los deportes de alto rendimiento pueden poner una gran carga en el corazón, lo que puede aumentar el riesgo de sufrir un infarto de miocardio. Además, algunos atletas pueden utilizar sustancias para mejorar el rendimiento que pueden aumentar aún más el estrés en el corazón. También se incluyen los defectos cardíacos congénitos y las lesiones coronarias'.
{"titulo":"¿Por qué no se debe beber jugo de naranja en el desayuno?","enlace":"https://www.elheraldo.co/salud/por-que-no-se-debe-beber-jugo-de-naranja-en-el-desayuno-esto-es-lo-que-sugieren-los-expertos"}
Acciones que pueden contribuir a evitar los riesgos en el corazón
Los padecimientos cardiacos no tienen requisitos de edad y los síntomas pueden ser difíciles de identificar, es importante adquirir hábitos saludables para el corazón, programando y manteniendo exámenes físicos de rutina.
'Es importante que los pacientes jóvenes estén al tanto de los factores de riesgo y las causas potenciales del infarto de miocardio, y que trabajen en conjunto con sus médicos para prevenir esta afección. Esto puede incluir llevar una dieta saludable, hacer ejercicio regularmente, no fumar, y controlar cualquier enfermedad subyacente', dijo el cardiológo, Germán Pérez.
En general, el riesgo de infarto de miocardio en los deportistas es relativamente bajo en comparación con la población general. Sin embargo, es importante que los atletas estén al tanto de los factores de riesgo y trabajen en conjunto con sus médicos para controlar cualquier enfermedad subyacente y prevenir complicaciones graves.
'Es importante que sigan un entrenamiento adecuado y eviten el uso de sustancias para mejorar el rendimiento que puedan poner en riesgo su salud cardiovascular'.
