La variante ómicron de covid-19 ha vuelto a restringir la actividad social en varios países europeos, mientras que cada vez son más los que blindan sus fronteras frente a los vuelos procedentes de países de África austral para intentar frenar el aumento de los contagios.
Países Bajos está en confinamiento nocturno para las actividades no esenciales, el Reino Unido exigirá de nuevo el uso de mascarillas en tiendas y transporte e Israel se ha convertido en el primer país del mundo en volver a prohibir la entrada al país de los extranjeros.
Hasta el momento se descarta que se tomen nuevamente medidas como la obligatoriedad del teletrabajo en territorio británico.