El asesinato de Irina Zarutska, una mujer ucraniana refugiada en Estados Unidos, ha causado conmoción internacional y destapado el extenso historial criminal de su presunto agresor, Decarlos Brown Jr., detenido el pasado 22 de agosto en Charlotte, Carolina del Norte.
La víctima fue atacada en un tren de la ciudad, donde recibió múltiples puñaladas que le causaron la muerte de inmediato. La rápida reacción de un pasajero, que alertó al personal del transporte, permitió que la Policía detuviera a Brown al descender del vagón. En su poder se halló el arma blanca manchada de sangre con la que habría cometido el crimen.
Documentos judiciales revelaron que Brown acumulaba 14 detenciones anteriores por robo, agresión, posesión ilegal de armas y asalto con arma blanca. A pesar de ese historial, se encontraba en libertad condicional al momento de los hechos, lo que ha generado indignación e inició un debate sobre la efectividad del sistema judicial frente a delincuentes reincidentes.
El perfil del detenido también preocupa a las autoridades. Familiares aseguraron que sufría alucinaciones y convencido de que el Gobierno le había implantado un microchip en el cerebro. Incluso, en 2022, llegó a atacar a su propia hermana. En meses recientes fue acusado de uso indebido del 911, tras llamar reiteradamente para denunciar que una “sustancia artificial” controlaba sus movimientos, situación que la Policía catalogó como un problema médico.
Ver más: Revelan estremecedor audio del asesino de Irina Zarutska, ucraniana refugiada en EE. UU.
La comunidad ucraniana en Charlotte, y en otras ciudades del país, lamentó profundamente el asesinato de Zarutska. Se iniciaron campañas de recolección de fondos para repatriar su cuerpo a Ucrania y brindarle un funeral digno.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, condenó el ataque y responsabilizó a los demócratas de la violencia en el país. En un mensaje publicado en su red Truth Social, señaló que la víctima fue emboscada por un hombre con antecedentes penales y “problemas mentales” y criticó las políticas judiciales en Carolina del Norte, responsabilizando directamente al exgobernador Roy Cooper, hoy aspirante al Senado.
Trump aprovechó para impulsar su propuesta de extender el control federal de la seguridad en Washington D.C. y a otras ciudades gobernadas por demócratas, bajo el argumento de que el país enfrenta un “crimen sin precedentes”.
Lea también: Bolsonaro aún no irá a prisión pese a sentencia de 27 años: podrá presentar apelación
Entre tanto, Decarlos Brown permanece detenido sin derecho a fianza, mientras su defensa solicitó una evaluación psiquiátrica. El hombre enfrentará un juicio por asesinato en primer grado, delito que podría llevarlo a la cadena perpetua. El juicio se espera que comience en las próximas semanas.