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Un cambio sin sobresaltos. La francesa Virginie Viard presentó el martes en París su primera colección de alta costura, conservando los códigos con los que su mentor Karl Lagerfeld convirtió a Chanel en una de las firmas de moda más influyentes.

Las actrices Margot Robbie e Isabelle Huppert, así como la coreógrafa y bailarina española Blanca Li, asistieron a este estreno de Viard, una de las figuras más enigmáticas del mundo de la moda, que durante 30 años operó a la sombra de Lagerfeld.

La discreta diseñadora, que como Lagerfeld nunca reveló su edad, mantuvo hasta sus imponentes decorados, eligiendo para el desfile uno de los temas predilectos del maestro: los libros.

Bajo la cúpula de vidrio del museo Grand Palais, se alzó una espectacular biblioteca circular de dos pisos, con estanterías de madera, mesas y asientos para la lectura.

Gran erudito, políglota, el ‘káiser de la moda’ poseía cerca de 350.000 libros repartidos en diferentes bibliotecas personales, y fundó su propia editorial.

Tweed y calzado bicolor

Las modelos, con el pelo recogido en una coleta tirante y algunas con gafas de lectura, presentaron en este ambiente una colección para todas las ocasiones, abundante en clásicos de Chanel: el tweed, las chaquetillas cortas, los zapatos bicolor, las lazadas al cuello...Así, Viard, que entró en la firma en 1987, cuatro años después de que Lagerfeld tomara las riendas, retomó las fórmulas de éxito y también aplicó un cierto retorno al clasicismo y a las líneas más puras.

¿Para qué cambiar cuando funciona? Chanel, una de las pocas firmas de lujo todavía independientes, registró el año pasado un volumen de negocios de 9.880 millones de euros, una progresión anual de 12,5%.

'Junto a Karl buscamos crear las colecciones más bellas y hoy trato de continuar para que todo sea perfecto', dijo su ex mano derecha en una grabación difundida durante un homenaje a Lagerfeld celebrado el mes pasado en París.

En el desfile fueron protagonistas los abrigos largos de tweed cerrados por una retahíla de botones blancos. Viard introdujo cuatro bolsillos exteriores —un elemento presente también en chaquetas más cortas—.

Los cómodos pantalones palazzo, la firma de lujo los combinó con chaquetas entalladas y cinturones, siempre con colores uniformes y además insistió en los toques blancos ya sea en el cuello, las solapas o las mangas, rompiendo la uniformidad cromática.

Tras el desfile, Viard, que 'detesta' ser el centro de atención y apenas da entrevistas, salió a saludar brevemente a los asistentes.