‘JJ’, el ‘expara’ que fue 'objetivo militar' de ‘los Costeños’

Finalizaba la primera década del 2000 cuando en Barranquilla se libraba una guerra entre clanes. Antiguos amigos dedicados a la delincuencia que conformaron a ‘los Rastrojos’, y que por diferentes motivos decidieron separarse, iniciaron una confrontación armada que derivó en, quizá, la ola de crímenes más fuerte en la historia reciente de la ciudad. Uno de los actores del conflicto en ese entonces, según las autoridades, fue Javier Insignares Toro.

Alias JJ, Bejamín, J o el Gordo, como figuraba Insignares Toro relacionado en los expedientes de las investigaciones, fue asesinado este miércoles en el sector El Amparo, de Cartagena, por un grupo de sicarios. Recibió doce balazos que acabaron con su vida de manera inmediata. EL HERALDO hace un recuento de la vida delictiva de este hombre.

La banda criminal se asentó en el Atlántico, teniendo como central de operaciones los barrios ribereños principalmente. Entre sus cabecillas se encontraban exparamilitares como los hermanos Brayan y Juan Manuel Borré Barreto, ‘JJ’ y Senén Fabio Cedeño Camelo, alias ‘Arturo’. Algunos de sus trabajadores eran, por ejemplo, Jorge Eliécer Díaz Collazos, alias Castor, y Digno Palomino, quien para esos años eran jóvenes y sus nombres apenas comenzaban a sonar en el mundo delictivo.

La separación

Según un investigador de la Policía que en ese entonces tenía a su cargo las indagaciones contra los miembros de ‘los Rastrojos’, 'por problemas entre los cabecillas, su forma de querer actuar, robos de droga, etc, empezaron a separarse'.

Entonces nacieron dos facciones, una denominada ‘los Rastrojos Costeños’, la cual tenía como líderes a los hermanos Borré Barreto, quienes tenían como hombres de confianza a ‘Castor’, Digno Palomino, entre otros. La otra, conocida como ‘los Rastrojos Vallunos’, de la cual era jefe alias Arturo, quien tenía a su lado la experiencia en el mundo criminal de Insignares Toro, quien ya había pasado por las AUC y había enfrentado una guerra con ‘Los Paisas’ cuando hacía parte de ‘Los 40’.

'Esa guerra que hubo entre miembros de las dos bandas fue sin cuartel. Los homicidios en atentados sicariales eran constantes y cada vez se perfeccionaban más. Era una lucha entre la experiencia paramilitar de unos con la astucia del sicariato nacido en el interior del país de otros', aseguró el investigador quien ahora hace parte del nivel central de inteligencia de la Policía.

Con el pasar de los meses, las acciones de la Policía y los crímenes selectivos dieron pie para que ambos bandos se debilitaran. ‘los Rastrojos Vallunos’ llevaron la peor parte con la caída de varias de sus ‘alfiles’ más fuertes. Incluso Senén Fabio Cedeño Camelo, alias Arturo, su líder máximo, fue capturado.

'Prácticamente Insignares Toro quedó solo. Él tenía su grupo de hombres, pero se volvió objetivo militar de ‘los Rastrojos Costeños’ que después, con la caída de los Borré Barreto, se llamó solamente ‘los Costeños’', dijo la fuente.

El nombre Javier Insignares Toro y el alias ‘JJ’, empezaron a circular en panfletos amenazantes firmados por ‘los Costeños’ y fueron constantes las denuncias que instauró ante la Fiscalía. Actualmente, el exparamilitar ya había cumplido con su tiempo en prisión y se encontraba libre.

Sin embargo, tal como lo advirtió en una entrevista con el CTI, seguía siendo amenazado e incluso el 15 de marzo se salvó de un atentado perpetrado en Villa Carolina, norte de Barranquilla.