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Por 150 años, Bancolombia ha escrito historias junto a sus clientes y en esta trayectoria hay un capítulo acompañado de un personaje icónico con alas, sonrisa y una forma única de querer a la gente: la abejita Conavi.

Solo por esta Navidad, el banco trae de vuelta a la abejita Conavi, ese personaje entrañable que marcó generaciones y que vuelve para llenar de alegría y emociones a quienes la recuerdan: “porque aún sonreímos al verla, cantamos a todo pulmón el jingle requetefácil, celebramos con el tiro de esquina, tarjeta débito…, y muchos, con orgullo, conservan la tarjeta original”, señala Adriana Arismendi, vicepresidente corporativa de Mercadeo, Ventas Digitales y Experiencia de Clientes de Bancolombia.

La abejita trae con ella gran parte de lo que significa Bancolombia para el país: cercanía, confianza y optimismo, y vuelve para protagonizar una estrategia que estará presente en medios, redes sociales y activaciones en calle.

Para celebrar su llegada, Bancolombia pondrá a disposición de sus clientes una edición limitada de 300.000 tarjetas débito con la imagen de la abejita. Estarán disponibles en todas las sucursales del país a partir del 1 de diciembre, y se activará automáticamente para los clientes que tengan inscrita su tarjeta débito en Apple Pay y Google Pay a partir del 5 de noviembre.

La tarjeta física solo podrá ser solicitada en sucursales, y no se enviará preexpedida, ni se habilitarán enlaces digitales para solicitarla.

Conavi nació en 1974 con un propósito claro: ayudar a los colombianos a cumplir el sueño de tener un hogar propio. Comenzó siendo la Corporación de Ahorro y vivienda que no solo impulsaba la cultura del ahorro, sino también la confianza en un futuro mejor. Con el tiempo, se convirtió en una marca cercana, sólida y querida, presente en cada rincón del país.

Junto a ella, apareció la abejita Conavi, un personaje sonriente que dejó huella en el corazón de muchas personas y que, por más de 30 años, fue un símbolo que representó trabajo en equipo, alegría y optimismo. Más que una imagen publicitaria, fue una compañera cercana que estuvo presente en la vida de las familias.

Con la fusión de Conavi y Bancolombia, en 2006, la abejita desapareció, dando paso a un nuevo capítulo de esta historia en el sistema financiero.