Caducidad de APP del Río quedó en firme y arranca su liquidación

Cormagdalena mantuvo en firme el fallo con el que caducó el contrato a la Asociación Público Privada (APP) para recuperar la navegabilidad del río Magdalena, a cargo del consorcio Navelena.

La decisión se adoptó anoche en la audiencia de caducidad realizada en Bogotá en la que se dio respuesta a los recursos que interpusiera Navelena para mantener el contrato, la última acción jurídica fue un recurso de apelación y la solicitud de nulidad del fallo, que le fue negado.

En la lectura del fallo, Cormagdalena no aceptó los argumentos de los apoderados del consorcio y señaló que no contaban con 'razones fácticas y jurídicas'.

En la decisión se indica que Navelena no entregó los documentos completos en su acción jurídica y en algunos casos 'lo hizo de manera general e imprecisa'.

Uno a uno, durante la audiencia fueron rechazados los argumentos y entregados por Navelena, entre ellos, testimonios y otras pruebas solicitadas por la firma para probar que la empresa había cumplido con el contrato y con el cierre financiero.

'La caducidad ya está en firme y con esta decisión y la que tomó el Distrito de Barranquilla con relación a la declaratoria de calamidad pública, podemos proceder a hacer contratación por urgencia manifiesta de dragado en el canal de acceso al puerto de Barranquilla', manifestó Luis Fernando Andrade.

Según explicó Andrade Moreno, ahora se iniciará el proceso de liquidación del contrato para pagar a los acreedores de buena fe, empleados y proveedores.

'Con esta decisión podemos proceder a hacer un pago a todos estos participantes de buena fe, porque, aunque el objetivo de la caducidad es afectar al contratista que no hizo el trabajo debido hacia el Estado, es sobre todo mantener la integridad de quienes participaron y creyeron en este proyecto', agregó.

La liquidación terminará con el pago a trabajadores, proveedores y entidades financieras, la principal, el Banco Agrario, con el que se tiene una deuda de 130.000 millones de pesos. De las otras aún no se conocen los montos.

También iniciará el cobro de la multa por el incumplimiento de Navelena. En la decisión quedó estipulada la suma de 55.000 millones de pesos.

Entre las medidas que se adoptarán, la primera de ellas es la declaratoria de la urgencia manifiesta, y está previsto que Cormagdalena lo haga hoy. Con esa decisión se habilita la contratación rápida para el dragado del Río, y se espera que entre jueves y viernes se escoja la firma que se encargaría de los trabajos.

Según Andrade, el dragado se iniciaría la próxima semana, luego de que se adelante el trámite de contratación y se analicen las cotizaciones de las firmas.

Por ahora no se conoce el monto exacto de dragado, aunque desde la identidad calculan que la remoción no puede superar los 2.000 millones de pesos. 'Ya hemos hablado con dragadores', reconoció Andrade.

Con estas medidas se espera superar la calamidad pública que ha afectado el ingreso de buques de calado superior a los 8,3 metros y las consecuencias que se derivan para la economía de Barranquilla.

El plan de contingencia para el Río contempla dos etapas más. 'La segunda etapa la dividimos en dos, una parte se contrará a través del Invías en la zona entre Calamar y el canal de acceso al puerto de Barranquilla, y la otra con Ecopetrol, en el tramo de Calamar hasta Barrancabermeja', explicó el funcionario.

La tercera etapa es la apertura de una licitación y adjudicación de un nuevo contrato de APP a otro concesionario. Se espera que en enero del 2018 este proceso esté terminado.

'El gran daño para el país de este incumplimiento es que las obras de encauzamiento entre La Dorada y Barrancabermeja quedan suspendidas hasta que una nueva APP sea adjudicada. Ya la tenemos estructurada, pero toma tiempo y esperamos que en el primer mes del año entrante ya podamos contar con un nuevo concesionario que realice estas obras', aseguró.

Sobre este tema el presidente del Puerto de Barranquilla, René Puche, dijo que hay lecciones que deben aprenderse del proceso anterior para que no se repitan en la nueva licitación que se abrirá.

El Instituto Nacional de Vías, Invías, y Cormagdalena, firmaron ayer el convenio que tiene como objeto desarrollar el dragado de mantenimiento del canal de acceso al puerto de Barranquilla en un mediano plazo, pues se abrirá un proceso para contratar a la firma que se encargará de estos trabajos. El plazo de ejecución es hasta el 31 de diciembre de 2017, y la inversión proyectada es de 10.000 millones de pesos.

La participación de la multinacional Odebrecht en el consorcio Navelena como accionista mayoritario (87%), con su filial en Colombia, que en un comienzo parecía una gran ventaja para el contrato de APP del Río, por la trayectoria y experiencia que acreditó en proyectos de infraestructura en varios países, terminó convertida en el mayor obstáculo para que siguiera ejecutándose.

Diez meses después de que Cormagdalena adjudicara el contrato a Navelena cuyo socio minoritario es Valorcon (13%), estalló el primer escándalo con la captura de su presidente Marcelo Odebrecht, desde esa fecha, en junio de 2015, comenzaron los problemas para Navelena, pues no pudo concretar con ningún banco los créditos que requería para asegurar la financiación del cierre financiero que debía estar listo en junio de 2016.

Llegada la fecha y tras varios plazos Navelena no pudo acreditar el cierre y comenzó la búsqueda de un nuevo asociado que reemplazara a Odebrecht en lo cual no tuvo éxito. Varias fueron las firmas internacionales interesadas, desde empresas del Grupo Carso del magnate mexicano Carlos Slim hasta la firma PowerChina, con quien hicieron el último intento para ceder el contrato que vale 2,5 billones de pesos.

Incluso el banco japonés Sumitomo Mitsui con el anuncio de un crédito a finales de 2016, salvó al consorcio del primer proceso de caducidad por incumplimiento que abrió Cormagdalena, sin embargo tras el recrudecimiento del escándalo con la investigación del departamento de Justicia de Estados Unidos retiró su participación. Esto dejó nuevamente a Navelena ‘en el aire‘ y tras nuevos incumplimientos fue declarada la caducidad.