El colombiano Nairo Quintana, segundo en el podio final del Giro de Italia, lamentó que los 70 kilómetros de contrarreloj de la edición del centenario de la ronda italiana 'son demasiados para mí'.
'Sabíamos que teníamos que llegar con más tiempo en la crono. Si llegábamos con este tiempo sabíamos que podía pasar lo que pasó', declaró en la meta de Milán Quintana, que afrontó este domingo la crono con 53 segundos de ventaja sobre Tom Dumoulin, pero perdió 1:24 con respecto al holandés, a la postre ganador de la carrera.
'A pesar de que me defendí bien, 70 km de contrarreloj son demasiados para mí con especialistas como Tom', añadió Quintana, refiriéndose a la distancia cronometrada del Giro, 39,8 km en la 10ª etapa en Montefalco y los 29,3 de la crono final en Milán, en las que el líder del Movistar perdió un total de 4:17 con el rodador holandés.
Pese a haber perdido la 'maglia' rosa en el último día, Quintana se mostró satisfecho de su actuación: 'Estar es el podio no es para decepcionarse'.
'No somos máquinas para decir y hacer lo que uno quiere', añadió.
'Hemos trabajado mucho, no todas las veces se recoge el premio de un gran trabajo, pero hemos hecho segundos, estamos en el podio y eso es grande para nosotros también', indicó.
Quintana admitió que no pudo imponer sus dotes de escalador en las etapas de montaña, en las que apenas pudo sacar diferencias a Dumoulin: 'Ha habido algunos días de montaña en los que hubiésemos podido hacer más, pero las fuerzas eran las que eran'.