Como una poderosa herramienta para transformar realidades y pensamientos, el arte continúa siendo todo un precursor de esperanza en aquellos jóvenes que allí se refugian para avanzar en caminos llenos de audacia.
'El arte sana corazones'
Convencida de que el arte construye nuevas narrativas para la paz, la directora del Centro Nacional de Memoria Histórica, María Gaitán Valencia, nieta del asesinado líder caudillista, Jorge Eliécer Gaitán, expresó que este espacio es un estímulo para sanar corazones.
'Lo importante de las expresiones artísticas es que hay unas juntanzas que se hacen porque he visto que las memorias se cantan, se bailan, se tejen y se llora y esos llantos hay un trabajo de sanación muy importante y que todo lo que se hace a través del arte sirva para el esclarecimiento de la verdad'.
Gaitán resaltó que Arte Fest es un gran ejemplo de cómo en medio de una amplia diversidad se puede dar paso a la unión y reconciliación.
(Lea también: Jimena Romero, 25 años de una vida escrita a guiones)
'Si oímos a cada quien, todos estamos con un mismo dolor, todos vivimos en un mismo conflicto, lo que tenemos es que conversar de él y saber que el pueblo tiene la capacidad de avanzar para poder tener un país en paz'.
El legado de su abuelo, Jorge Eliécer Gaitán camina con ella, afirmando que lo tiene en sus venas.
'Toda la vida nací rodeada del gaitanismo y creo que parte de toda la apuesta que estamos liderando es escuchando a Gaitán'.
(Le puede interesar: Una sobrina de la viuda de Borges es la nueva administradora de sus bienes)
Para la funcionaria es importante que la memoria se construya en todos los territorios y es por ello que Villas de San Pablo es el actual destino, un escenario de encuentro como brújula del futuro.
'Hay que entender que el país es mucho más grande que las instituciones y que el territorio habla y los centros de las ciudades capitales también deben escuchar'.



















