Nadie se ha acordado de Luis Díaz. Después de la preocupación y molestia que generó su llamado a la Selección Colombia antes del crucial juego ante Deportivo Cali (a pesar de que se había anunciado inicialmente que se incorporaría al combinado patrio luego de ese partido), el técnico Julio Comesaña se las arregló sin el guajiro. Junior derrotó 2-0 al cuadro azucarero y 3-2 al Atlético Nacional.

Cinco goles en dos partidos y clasificación a la final de la Liga. Los rojiblancos solucionaron sus problemas para anotar, paradójicamente, sin el que es considerado el atacante más desequilibrante del equipo.

En Medellín, ante los verdolagas, el cuadro tiburón comenzó perdiendo con un gol de camerino y sufrió las lesiones de Fredy Hinestroza, el buen reemplazo de Díaz; Willer Ditta, el mejor complemento de Rafael Pérez actualmente; y Daniel Moreno, que se olvidó de las críticas y hacía su más destacado partido del semestre.

A pesar de todas esas adversidades, Junior se repuso, aguantó como pudo y salió airoso y finalista del estadio Atanasio Girardot. No se amilanó, no se arrugó, no se rindió, jugó como lo que es actualmente, como un campeón, contra viento y marea, con todo y contra todo.

Así debe ser hoy, con Ditta o sin Ditta, con Hinestroza o sin Hinestroza. Llueva, truene o relampaguee (como en el ‘diluvio’ de ayer en la ciudad), debe salir a la cancha con el cuchillo entre los dientes, sin confiarse, sin relajarse, sin creerse más ni menos que nadie, con el carácter para luchar y jugar con calidad el primer capítulo de una serie que pone en juego un nuevo título de Liga.

Sebastián Viera, Rafael Pérez, Luis Narváez, Víctor Cantillo y Teófilo Gutiérrez son la columna vertebral de este equipo. Viera y Pérez son seguridad, Narváez es temple y Cantillo y Teo son el faro que alumbra el camino hacia la portería rival.

Si el atacante de La Chinita está inspirado, todo es más viable, pero el fútbol es un esfuerzo colectivo y todos los Tiburones, absolutamente todos, entre quien entre hoy ante Pasto, deben continuar jugando como campeones.