Diciembre bioseguro
En memoria de quienes fueron avasallados por la Covid-19 y por el bienestar de todos, festejemos con mesura, sin aglomeraciones.
La ventolera que nos mece en su frescor, el cielo azul claro intenso y el sol brillante, nos hacen sentir que llegó diciembre, el mes más anhelado y preciado. Durante todo el año, con entusiasmo, esperamos las fiestas decembrinas y el espíritu mágico que las envuelve.
Para vivirlas plenamente yo acostumbro, desde noviembre, a temperar mi alma, compartiendo con mis hijos menores, Laura José y José Julián, películas y cuentos emblemáticos de la Navidad. Así mismo, con emoción, gozo enteramente las tradiciones navideñas como son: armar el arbolito, poner las velas en la madrugada del 8, asistir a las novenas, compartir con la familia la cena navideña y acompañar a Papá Noel en la misión de atender las cartas de hijos y nietos, y al final del mes nos abrazamos y cantamos en coro ‘Faltan cinco pa’ las doce’. Sin duda, diciembre es fantástico, nos regresa a nuestra niñez y nos hace gozoso el compartir, la familiaridad, la solidaridad y nos llena de esperanza para comenzar el nuevo año.
Bien sabemos que este diciembre no tiene antecedentes por las condiciones suigéneris que atraviesa la humanidad. La pandemia de Covid-19, declarada por la OMS desde marzo pasado, ha cobrado la vida de más de 1.500.000 personas y enfermado a 64 millones, al igual nos encerró en nuestras casas y ralentizó la economía mundial. Es necesario que este año cambiemos la forma de vivir y celebrar las fiestas navideñas para evitar el contagio, mucho más ahora que estamos tan cerca de contar con los medios de inmunización contra la enfermedad. De hecho, el Reino Unido ya aprobó la vacuna diseñada por Pfizer y Biontech, y empezará esta semana a administrar 40 millones de dosis.
Tal como lo han recomendado la Alcaldía Distrital y el Ministerio de Salud, debemos evitar las aglomeraciones y la exposición innecesaria; lo ideal es celebrar con el núcleo íntimo de convivencia y darnos abrazos ‘virtuales’ con los familiares y amigos que no comparten nuestro techo. Estas recomendaciones no solo están definidas para Colombia sino en países como Francia, Italia, España o en el Reino Unido se reimpusieron las medidas de aislamiento social.
Afortunadamente para la niñez, Papá Noel, Santa Claus, el Niño Dios o cualquiera de las figuras míticas a las que ven como proveedoras de sus anhelos y juguetes, tienen vía libre para transitar por el mundo, sin toques de queda u otras restricciones impuestas por el coronavirus, como lo anunció el vicepresidente de la Comisión Europea, Margaritis Schina, con el propósito de brindarles tranquilidad a los niños que veían en riesgo sus regalos.
En memoria de quienes fueron avasallados por la Covid-19 y por el bienestar de todos, festejemos con mesura, sin aglomeraciones y guardando todas las medidas de prevención necesarias, protegiendo, en especial, a las personas con mayores riesgos. No podemos olvidarnos de la presencia del virus y del creciente número de casos de contagio en esta segunda ola. Solo viviendo una Navidad biosegura podremos seguir teniendo salud y conservando la vida.
rector@unisimonbolivar.edu.co
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