En la Cámara Colombiana de la Infraestructura celebramos el avance de más del 62% de la construcción del Acueducto Regional del Norte, megaproyecto que permitirá tener una cobertura mínima del 98% en el suministro de agua potable en Barranquilla, Puerto Colombia, Tubará, Juan de Acosta, Usiacurí, Piojó, Galapa y Soledad, e impulsar el desarrollo turístico, inmobiliario, industrial y de servicios en el corredor costero y nuestra área metropolitana.
Durante un recorrido que hicimos recientemente con el Gobernador del Atlántico, Eduardo Verano, y con la Secretaria de Agua Potable y Saneamiento Básico, Lady Ospina, pudimos verificar el estado actual de esas obras, que entran ya en su recta final gracias a la conjunción de esfuerzos de la administración seccional, del gobierno nacional, contratista e interventor y con una inversión superior a los $198.000 millones.
Alcanzar ese nivel de cobertura significará una mejora invaluable de la calidad de vida de 1,6 millones de personas y en los indicadores de salud pública del departamento, ubicarnos como líderes en el país en la prestación de este servicio y abrir oportunidades reales para avanzar en el crecimiento económico a partir de la atracción de inversión empresarial, y la generación de empleos formales.
Tal vez no seamos del todo conscientes de lo que significa este proyecto y por ello es bueno recordar que tener garantizado el suministro de agua potable es una condición fundamental para la construcción de viviendas, especialmente en Puerto Colombia, Tubará y Usiacurí e igualmente para impulsar un desarrollo urbano residencial, comercial e industrial, ordenado, planificado y sostenible en las 16.000 hectáreas que tenemos entre la primera Circunvalar y la Circunvalar de la Prosperidad, el doble de las disponibles en Barranquilla.
Para Puerto Colombia representará independizar su abastecimiento de agua de Barranquilla, garantizando su continuidad y superando los inconvenientes derivados de la cuña marina que se registran en la bocatoma de su acueducto durante las temporadas secas de bajo nivel del río Magdalena. Además, que ese municipio disponga de una planta de tratamiento de agua potable de 900 litros por segundo, y dos tanques de almacenamiento de 700 metros cúbicos cada uno, le permitirá a Triple A liberar ese volumen del sistema actual para atender la creciente demanda de Barranquilla.
Confiamos en tener pronto buenas noticias del Ministerio de Vivienda, Ciudad y Territorio sobre la construcción del Tanque Lago Alto, obra complementaria fundamental del sistema del Acueducto Regional del Norte, que demanda inversiones por $47.000 millones.
Otro elemento que le da mayor valor a los avances en la ejecución de este proyecto es lo que va a representar para la consolidación del mercado regional integrado que maneja Triple A, el cual es un ejemplo exitoso de aplicación de economías de escala que permiten optimizar recursos, reducir costos operativos, prestar un servicio más eficiente con mayor calidad y cobertura, tener tarifas más competitivas para los usuarios, y hacer una distribución equitativa del recurso hídrico, asegurando su sostenibilidad. En síntesis, un sistema que hay que preservar y fortalecer en todo el Atlántico.
*Director ejecutivo CCI Norte