Everth Bustamante, miembro activo del M-19 durante buena parte de su vida y posteriormente militante del Centro Democrático, publicó su libro Rebeldía, Armas y Democracia que no dudo en recomendar para entender parte de la historia reciente del país y lo que está pasando ahora.
Llama la atención que la mayoría de los medios se han centrado en las relaciones personales -en las cuales no quiero entrar- entre Bustamante y Petro. En verdad el libro va mucho más allá de esas puntuales referencias político-personales como miembros del M19. En 1967 entramos juntos a estudiar en el Externado de Colombia, época en que, a diferencia de ahora, los jóvenes no despreciábamos la política, sino que nos involucrábamos en ella y no necesariamente en sentido electoral. Es la llamada generación del 60, estudiosa y beligerante, semillero de políticos, y hay que decirlo también, de varios que tomaron el camino de la guerrilla principalmente con el ELN.
En el Externado de entonces agitaban ideas Jorge Posada quien fuera presidente de la FUN; Rodrigo Lara Bonilla, gran orador del MRL y otros que tomaron rumbos diferentes en la vida. En mi caso, venía de las juventudes del MRL en Chaparral y de haberle organizado al sacerdote contestatario Camilo Torres, con la complicidad del cura párroco y del rector del colegio Aníbal Jurado, un acto político al que, entre quienes recuerdo, asistieron: Manlio Lafont y Jaime Arenas Reyes de la UIS, que se incorporó luego al ELN, a quien ese mismo grupo asesinó por haber “desertado” para convertirse en asesor del joven ministro de Educación Luis Carlos Galán.
Everth, venía de Zipaquirá con su amigo Armando García. Estudioso e inquieto, pero con beligerancia política. Ya en el 70 hacía parte del grupo de jóvenes que apoyaban la candidatura de Belisario. Él nos cuenta que el alegado fraude del 19 de abril le cambió su rumbo y prácticamente esa misma noche se incorporó a la ANAPO en su pueblo natal. Muchos años después, sus compañeros de estudio nos sorprendimos al saber que militaba y con peso propio en el movimiento guerrillero 19 de abril. Con las diferencias sobre episodios de la vida nacional, hemos mantenido una amistad no alterada por razones políticas.
Como protagonista que fue, el autor describe muy bien el surgimiento del M19 como respuesta armada al que se estimó entonces fraude electoral del 19 de abril de 1970. Por eso el lema inicial: “Con el pueblo, con las armas, con María Eugenia al poder”. La ANAPO fue un movimiento nacionalista, populista, mediático, de claro origen conservador. Su fundador Rojas Pinilla nunca ocultó su origen como conservador boyacense. En el gobierno de Ospina Pérez fue el comandante de la brigada en Cali cuando el asalto a la casa liberal en 1949 y luego ministro de Obras Públicas. La ANAPO tuvo mucho respaldo popular pero nunca fue socialista ni comunista. La bandera del M19, incluso hoy es idéntica a la de ese movimiento.
El M19 surgió con una gran campaña de expectativa, muchos creyeron que era un nuevo vermífugo; los parlamentarios inicialmente elegidos como el chato Nieto Rojas, Bayona Carrascal, Toledo y otros, eran de origen conservador; luego entraron jóvenes desengañados por las FARC como Bateman y Fayat; siempre realizó actos espectáculares como el robo de la espada de Bolívar, el de las armas del Cantón Norte -algunas de las cuales guardó Everth en Zipaquirá-, la toma de la embajada dominicana y, el de más clara estupidez política: la toma del Palacio de Justicia.
El libro aclara muchas cosas. No todos los dirigentes del M19 estuvieron al tanto de la toma del Palacio y por eso el autor vuelve a pedir perdón a su universidad y al país. La reincorporación del M19 se produjo durante el gobierno Barco y no por la constituyente. Por su populismo hizo elegir al profesor Maturana constituyente y alcanzó a proponerle también al carismático Rene Higuita. Alcanzó a elegir 19 constituyentes. Sin embargo, en las elecciones del Congreso revocado en 1991, solo sacó nueve senadores y en el 93 ya no existía como movimiento político.
El asesinato de Fayad por fuerzas del Estado impidió que se conociera la verdad que la guerrilla no contó sobre el palacio de justicia. Aun cuando él no lo dice, las amnistías e indultos apresurados lo impidieron también. Ni por sus orígenes ni por sus actuaciones el actual gobierno puede considerarse de izquierda. Y hay más reflexiones…
@gomezmendeza








