La Inteligencia Artificial (IA) y los avances en la tecnología vienen creciendo en los últimos años a tal punto que cada vez conocemos nuevas tendencias alrededor de ella. En la actualidad, está más cerca del ciudadano común, incluso de aquellos que no nacieron en la era digital.
Pero a medida que se presentan esos avances, también encontramos en diferentes sectores sociales como la brecha tecnología se ensancha y eso lleva a la necesidad de democratizar la IA y estos avances.
Diferentes empresas han optado por incluir cada vez más la IA en sus productos y ponerla a disposición de sus audiencias, Samsung es una de las compañías que ha venido democratizando su acceso a través de sus nuevos dispositivos móviles, especialmente en Colombia y en regiones como la Costa Caribe.
Sobre los desafíos que puede tener la implementación de la IA y el uso de los usuarios, Daniel Viloria, gerente de productos de la división de móviles de Samsung Colombia, manifestó que es necesario educar a las personas para que puedan sacar más provecho a esta recurso que al final del día es una herramienta de asistencia.
“Todavía tenemos un reto y es que las personas primero le quiten el miedo a la inteligencia artificial. Muchas personas no saben cómo usarla y ese es el mayor desafío que tenemos, ¿cómo le enseñamos a la gente a que la inteligencia artificial llegó? Hay que convivir con ella, pero hay que aprender a usarla porque al final del día lo que hace es facilitar de la vida. Es un tema de productividad, creatividad y de comunicación.”. Señaló Viloria.
Durante los últimos meses, la compañía surcoreana ha lanzado modelos de gama media y media-baja, como el A26, A36 y A56, que no solo incorporan capacidades de IA, sino que las ofrecen a precios más asequibles. De esta forma, buscan romper las barreras económicas y tecnológicas que han limitado el uso de estas herramientas en sectores amplios de la población.
“En Colombia, la serie Galaxy A alcanza una participación de mercado del 25 %, lo que evidencia su relevancia en el segmento. Esta posición refleja su capacidad para satisfacer las necesidades de los usuarios, combinando innovación, accesibilidad y rendimiento en un solo dispositivo”, afirmó Daniel Viloria.
Tecnología al servicio del usuario
Los nuevos equipos de Samsung vienen equipados con procesadores avanzados que integran unidades especializadas para IA, conocidas como NPU (estas permiten realizar múltiples operaciones con mayor eficacia), permitiendo tareas como traducción simultánea, edición de imágenes con calidad profesional, búsqueda visual a través de imágenes y hasta asistentes inteligentes que pueden escribir correos o transcribir audios. Y todo esto, sin necesidad de pagar suscripciones adicionales.
Uno de los grandes diferenciales de esta propuesta es que los dispositivos vienen con la IA integrada de fábrica, sin cobros ocultos ni versiones premium. En otras palabras, la Inteligencia Artificial está incluida en el precio del equipo, que puede ser desde $1.094.900 en adelante, dependiendo de la referencia.
La compañía ha diseñado un ecosistema completo que permite integrar otros dispositivos como relojes, televisores, lavadoras o parlantes, todos conectados y potenciados por IA. Por ejemplo, un smartwatch puede ajustar su brillo automáticamente según la luz ambiental, y una tablet puede transcribir conversaciones grabadas para facilitar el trabajo diario.
Este ecosistema tiene una fuerte presencia en la región Caribe, donde Samsung ha logrado una participación del 36 % del mercado. No obstante, la empresa reconoce que uno de los mayores retos sigue siendo educar al usuario sobre cómo usar la IA y perder el miedo a interactuar con ella.
Facilidad de acceso a los dispositivos
La compañía tecnológica ha venido reforzando su campaña de intercambio de dispositivos antiguos por nuevos (trade-in), ofreciendo bonos garantizados y promoviendo el reciclaje responsable. Esta estrategia no solo ayuda al bolsillo del consumidor, sino que también contribuye a reducir la huella tecnológica del país.
En temas de ciberseguridad la empresa ha trabajado en sus dispositivos para que almacenan la información biométrica y contraseñas directamente en un chip del equipo, sin depender de una nube de datos, lo que ofrece mayor seguridad y privacidad para el usuario.
