Compartir:

Una jueza de Estados Unidos dictaminó este jueves que la demanda por difamación presentada contra Robert Morris, exasesor espiritual de Donald Trump durante su campaña presidencial de 2024, deberá seguir su curso al considerar que existen indicios suficientes del delito.

La jueza Emily Tobolowsky, del condado de Dallas, rechazó la petición de Morris y de su iglesia, Gateway -uno de los megatemplos más grandes de Estados Unidos-, quienes buscaban ser exonerados alegando que la primera enmienda establece que los tribunales y el Gobierno no deben intervenir en “asuntos de la iglesia”.

El líder religioso y su iglesia fueron acusados por Cindy Clemishire por utilizar a sus miembros para difamarla, por minimizar y tergiversar el abuso sexual que ella denunció haber sufrido por parte del pastor en la década de 1980, mientras ella tenia 12 años hasta los 16.

Morris, de 64 años, se declaró culpable de abusar sexualmente de Clemishire en octubre pasado y recibió una condena suspendida de 10 años, con la condición de cumplir seis meses de prisión y una restitución de 250.000 dólares.

La vinculación de Morris con Trump se remonta a 2016, cuando era miembro del consejo evangélico ejecutivo que asesoró al republicano para su primera campaña política.

En 2020, Trump visitó la iglesia Gateway para un evento social donde el anfitrión era Morris, de acuerdo con reportes de CBS News.

Cuando Morris se vio envuelto en el escándalo sexual en 2024, durante la campaña electoral de Trump, su equipo aseguró que el pastor de Texas ya no tenía ningún rol en su equipo ni en su consejo de fe.