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Cuando comenzó el alto el fuego en la Franja de Gaza hace una semana, el Ejército de Israel tuvo que replegarse como parte del acuerdo hacia la conocida como “línea amarilla”, una demarcación tras la que las tropas israelíes continúan apostadas y desde la que han abierto fuego en numerosas ocasiones contra la población.

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Esta semana, más de 20 gazatíes que cruzaron esta línea imaginaria (y no señalizada) en un intento de volver a sus hogares, según las autoridades sanitarias gazatíes, han muerto a manos del Ejército de Israel.

El acuerdo firmado por Hamás e Israel establece que la tregua abarca a toda la Franja de Gaza y que el Ejército israelí debe retirarse hasta una demarcación que ha sido denominada “línea amarilla”, pero eso no implica que el alto el fuego no rija en él, aunque el Ejército israelí ha invocado la legítima defensa y las amenazas a sus tropas para disparar contra palestinos en esa zona.

¿Qué es la “línea amarilla”?

La “línea amarilla” es la demarcación imaginaria hasta la que tuvo que retirarse el Ejército israelí como parte de la primera de las tres fases de su retirada de Gaza, pactadas en el acuerdo de alto el fuego entre Israel y Hamás.

El perímetro entre esta línea y la frontera entre Gaza e Israel permanece bajo control militar israelí y abarca algo más del 50 % de la Franja.

Por esto mismo, hay localidades enteras que aún son inaccesibles para la población gazatí por el riesgo a sufrir un ataque del Ejército de Israel, como Beit Hanoun (norte) o Rafah (sur).

Según un mapa que difundió el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, la zona bajo control militar que se extiende entre la línea amarilla y la frontera entre la Franja e Israel tiene unos 1,5 kilómetros de ancho en su zona más estrecha y unos 6,5 en la más amplia (la que abarca la ciudad sureña de Rafah).

Ese mapa a escala no define referencias específicas sobre el terreno.

Falta de señalización

La línea amarilla no ha estado en ningún momento señalizada para la población, por lo que muchos gazatíes se orientaban con la información de conocidos o de forma meramente visual (si ven tanques o no).

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“Solo nos movemos por las zonas donde vivimos. Si quiero saber si un lugar es peligroso, pregunto a la gente: ¿alguien ha estado allí en las últimas horas? La situación es peligrosa. Son los vecinos quienes nos informan de lo que realmente pasa”, explicó a EFE el jueves Mohamed Badaui, residente del barrio de Zeitún de la capital.

Este viernes, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, anunció que el Ejército estaba señalizando el área por la que trascurre esta frontera imaginaria en el territorio palestino para conocimiento de la población.

Más de 20 muertos por cruzarla a pesar del alto el fuego

Casi diariamente desde que comenzó la tregua, el Ejército de Israel ha abierto fuego, ya sea directo de las tropas o con drones, contra los gazatíes que accedían al área bajo su control militar, cobrándose la vida de más de 20 personas.

Fuentes del Ministerio de Sanidad gazatí indicaron a EFE que en la mayoría de casos se trataban de palestinos que trataban de volver a sus hogares en barrios aún en la zona militarizada.

Muchos de estos casos se han dado en Shujaiya, en el este de la ciudad de Gaza (norte).

Evolución de la retirada israelí

Las segunda etapa de la retirada israelí de Gaza llevaría a las tropas a replegarse hasta una nueva línea, reduciéndose el perímetro de Gaza bajo control del Ejército hasta en torno al 40 % del territorio.

El avance de la retirada a la segunda fase producirá cuando se despliegue en Gaza la Fuerza Internacional de Estabilización incluida en el acuerdo de alto el fuego. Esta estará encargada de supervisar la seguridad en el enclave y formar a la Policía que se hará cargo posteriormente.

No se ha hecho pública información sobre cuándo entrará esta fuerza en Gaza.

La tercera fase de la retirada implica el repliegue del Ejército israelí hasta una “zona colchón” que abarca en torno al 15 % del territorio gazatí y discurriría junto a la frontera entre la Franja e Israel. Este perímetro permanecería ocupado por las fuerzas armadas de forma indefinida, envolviendo posiciones clave como el cruce de Rafah, en la frontera con Egipto.