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En silencio, en medio de lágrimas y con una misma pregunta ¿por qué ocurrió esto? Recibieron estudiantes del Colegio La Sagrada Familia, familiares y amigos cercanos recibieron anoche los restos mortales del pequeño Antonio José Pabón Meza, de 7 años, uno de los niños heridos al incendiarse la buseta en la que viajaban el domingo en Fundación, Magdalena.

Antonio José es la víctima #32 de la tragedia de la que mañana se conmemoran ocho días.

A las 10:15 de la noche del jueves, Norma Meza, recibió por parte de los galenos de la Clínica Adelita Char de la capital del Atlántico la noticia que su pequeño Antonio había dejado de existir, lo cual se constituyó en el fin de su esperanza de verlo salir con vida del centro asistencial.

Desconsolada, la mujer y su esposo Heriberto Pabón, decidieron dar aviso a sus familiares, quienes en Fundación elevaban plegarias para que el pequeño se recuperara.

'Yo hablé con Nora, ella me dijo que el niño estaba mal, que orara para que Dios hiciera un milagro en él', dijo entre lágrimas Sandra Reyes, amiga cercana de la familia Pabón Meza.

Asimismo, en un tono de voz bajo, producto del pesar que causó el deceso de Antonio José, su tía Ana Meza indicó que este era el último de tres hermanos. Recordó que era un alegre que le gustaba jugar fútbol. 'Pero que ya no lo volveré a ver', exclamó, mientras se secaba las lágrimas.

Esta misma escena se repitió en el Colegio La Sagrada Familia, donde Antonio cursaba primer grado. En medio de su dolor, la docente Sandra Ponce Navarro recordó las cualidades de uno de sus alumnos fallecidos el domingo.

'Él era alguien único, dedicado, amoroso, dispuesto siempre a ayudar a sus compañeros', afirmó la docente.

Señaló que desde el primer día de clases, el niño mostró lo especial que era. 'Se le notaba el amor por su mamita, quien es la portera del colegio y a quien le ayudaba a organizar algunas cosas. Muchas veces escuché decirle: mami te ves hermosa, al mismo tiempo que la miraba'.

Las 30 cartas. El jueves, mientras daba clases a sus demás pequeños, indicó que en varias ocasiones los llamó por el nombre de Antonio. 'Cuando les decía así, me respondieron seño tu si tienes a Antonio pendiente, él va a volver pronto', relató Ponce Navarro.

Este pensamiento de esperanza lo dejaron reflejados los amiguitos de clases de Pabón Meza, quienes les hicieron 30 cartas y las enviaron a Barranquilla para que se las entregaran.

'Me dijeron que el jueves, cuando Norman ingresó a UCI, le leyó cada una de las notas', afirmó la docente.

La velación. Los restos mortales del pequeño Antonio José, quien residía junto a su familia en el barrio Vista Hermosa de Fundación, fueron velados en el colegio La Sagrada Familia y a las 9 a.m. será sepultado en el cementerio San Rafael.

'Esto ha sido terrible, tener que enterrar a un ser tan pequeño, indefenso y lleno de vida no parece justo, si esto es doloroso no me quiero imaginar cómo será el sepelio colectivo que se realizará este miércoles con los 31 niños más', dijo una fundanense.