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En un tiempo donde el rebusque representa un valor no menor en la economía de muchos hogares colombianos, ha comenzado a abrirse con fuerza un nuevo concepto: ‘Dropshipping’.

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El dropshipping es un modelo de negocio en el cual el minorista no almacena los productos que vende.

En cambio, cuando el minorista vende un producto, lo compra a un tercero, generalmente un mayorista o fabricante, y este se encarga de enviar el producto directamente al cliente.

De esta manera, el minorista nunca maneja el producto físicamente.

¿Cómo funciona el dropshipping?

El proceso de dropshipping generalmente sigue estos pasos:

  1. El cliente realiza una compra en la tienda en línea del minorista.
  2. El minorista recibe el pedido y envía la información del cliente al proveedor.
  3. El proveedor prepara y envía el producto directamente al cliente.
  4. El minorista cobra al cliente y paga al proveedor, quedándose con la diferencia como ganancia.

¿Es rentable el dropshipping?

Para Mukunda Reddy, estudiante de la Lovely Professional University, en India, este modelo 'puede reducir el mantenimiento de los almacenes y emplear el personal necesario (...) debido a esto, los vendedores pueden reducir el precio del producto, lo que probablemente podría aumentar sus ventas'.

En ese sentido, el joven explica que 'las ventajas del envío directo incluyen un bajo requisito de capital, sin riesgo de 'stock' no vendido porque el 'stock' siempre está rotando en el sistema de cadena'.

Sin embargo, la rentabilidad del dropshipping depende de varios factores, incluyendo la elección del nicho, la calidad de los proveedores y las estrategias de marketing. Así lo asegura Paula Llanos, economista afiliada al Foro Económico Mundial.

'Es posible tener buenos márgenes de beneficios, pero ahora más que nunca, los emprendedores no deben perder de vista la alta competencia y el valor de la publicidad', expone.