¿Cuándo nació la enemistad entre Faustino Asprilla y Julio Avelino Comesaña? EL HERALDO consultó al técnico colombo-uruguayo cuando el ‘Tino’ lo atacó por primera vez a través de los medios de comunicación.
El hecho ocurrió cuando la Federación Colombiana de Fútbol nombró a Comesaña como asesor deportivo en la era Leonel Álvarez. En ese entonces, el ex delantero vallecaucano afirmó que el nombramiento 'fue el error más grande que cometió la Federación'.
Comesaña respondió, recordando un episodio que le sucedió con Faustino siendo técnico del Junior.
'Asprilla habla mal de mí porque lo eché del vestuario un día que entró borracho en Barranquilla. Yo estaba dirigiendo al Junior contra el Pereira, él llegó, entró cuando yo estaba hablando en el descanso, se sentó al lado de Giovanni Hernández a hablar y hablar y yo le dije 'por favor, Fausto, retírate', contó el orientador colombo-uruguayo en diálogo con este medio el 16 de febrero de 2012.
Desde ese momento, cada vez que Asprilla es indagado por Julio Comesaña, el exatacante no se corta al momento de lanzarle críticas al DT. La última se presentó hace poco, cuando, en diálogo con EL HERALDO, el ‘Tino’ manifestó que: 'Comesaña nunca me ha gustado como entrenador ni como persona. Me parece que para llevar 30 años en el fútbol colombiano y haber ganado solo un título, es muy poquito'.
El actual técnico del Junior respondió nuevamente a los cuestionamientos del tulueño, aunque no quiso profundizar más en el tema.
'Yo no puedo entrar a polemizar con Faustino (Asprilla) porque estoy en un escalón distinto a él. Acepto lo que diga, eso es problema de él. Lo que no acepto es que hable de mí como persona, porque no me conoce, no me trató. Además, yo no creo que tenga autoridad moral para hablar no solo de mí, sino de nadie', expresó.
'Fausto es así, habla de los amigos, habla de los compañeros, se toma unos traguitos y habla de cualquiera. Es un muchacho hasta simpático, a mí me causa gracia, me dan risa las cosas que dice. Si las críticas vinieran de otras personas, quizá me preocuparan, pero de él no. Que siga su camino y yo sigo el mío', concluyó.