La Liga MX tuvo un juego en particular dentro su jornada sabatina que se llevó todos los reflectores. América y León protagonizaron un encuentro lleno de goles, anulaciones, expulsiones y hasta agresiones por parte del juez central del compromiso. No acaba de leer mal.
El árbitro mexicano Fernando Hernández no soportó los reclamos del mediocampista argentino Lucas Romero, quien le recriminaba una mano en el primer tanto del América, y tras sacarle tarjeta amarilla, también le dio un rodillazo que dejó tendido al futbolista de León en el suelo.
Fue una jugada muy rápida y hasta extraña para todos los presentes en el estadio Azteca. Lanzado un cobro de tiro de esquina, el balón termina pegando en la humanidad de un defensor americano y, tras terminar pagando el esférico en el área, fue bien aprovechado por Diego Valdés que no dudó en mandarla a guardar —era el empate 1-1 parcial—.
Varios jugadores leones rodearon a Fernando Hernández, siendo Lucas Romero el más intenso en sus reclamos, hasta que en la cámara se ve como este se deja caer. En primera instancia, no se nota la agresión del juez, pero luego de cambiar el ángulo de la repetición se puede evidenciar claramente como este alzó su rodilla para golpear al argentino.
El juego siguió, mas los ánimos se tornaron calientes. Golpes iban y venían. De hecho, hasta los entrenadores terminaron siendo expulsados por protagonizar una acalorada discusión, que le dejó hasta una camisa rota a uno de ellos. Fue empate a dos goles para ambos y gran indignación para la escena de Fernando Hernández.
'Lo que acabo de ver en principio es gravísimo, y debería amerizar la expulsión del arbitraje. Por reglamento, la Comisión Disciplinaria deberá sancionarlo hasta con 2 años, pero la Comisión de Arbitraje, puede darle de baja por la gravedad del hecho', opinó Edgardo Codesal, expresidente de la Comisión de Arbitraje mexicana.
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