La culpa no es de la vaca. Tampoco es del toro. La culpa es de la A.N.I (Agencia Nacional de Infraestructura- antes INCO), entidad encargada de estructurar, administrar y ejecutar los megaproyectos de concesiones viales a través de la figura APP, entre ellos la concesión Bogotá- Villavicencio a cargo de Coviandina SAS, a quien con este artículo damos respuesta a su solicitud de rectificación presentada a la dirección del diario EL HERALDO de Barranquilla a raíz de mi columna de septiembre 30 de 2025, titulada ¿La culpa es de la vaca o del toro?

1.El mayor acto de corrupción oficial de la historia del Colombia. Respuesta: Se trata de un contrato hecho a la medida de la empresa en comento, con unos deficientes estudios de conveniencia en detrimento del interés público.

2.Se hipoteca y se vende al país a pedazos. Respuesta: Es una forma metafórica de abordar el tema de la corrupción oficial del país, en este caso concreto, donde el colombiano que todavía no ha nacido llega a este mundo con una deuda a largo plazo. La responsabilidad es de la entidad contratante.

3.La culpa es de las gallinas de los criaderos de los campesinos de Chipaque. Respuesta: Estos fueron unos comentarios emitidos por un alto funcionario de Coviandina, que no logré identificar, tratando de echarle la culpa a los campesinos del sector por el mal manejo de las aguas.

4.La concesión Bogotá- Villavicencio es una vaca lechera. Respuesta: El contrato de concesión 005 suscrito entre la ANI y Coviandina, en el 2015, está hecho a la medida de las exigencias de la empresa que lesiona el interés público, pues el Estado colombiano no tiene dolientes ya que cada derrumbe lo financia la entidad contratante, no el concesionario, como debería ser.

5.No hay pronunciamientos de autoridad judicial…frente al concesionario. Respuesta: Es cierto, este contrato no ha sido demandado ante ninguna autoridad judicial, pues cumple con todas las normas legales, menos la de conveniencia en defensa del interés público.

Mientras tanto, esta media Colombia sufre la pérdida de un billón de pesos por el cierre de la vía por donde circulan unos 4.000 vehículos de carga /diariamente según Colfecar, el turismo y el comercio se perjudica con la pérdida de 50 millones de pesos al día, sin solución a la vista, pues nadie entiende cómo se estructuró este contrato, incluyendo a su clase política.

Sólo nos resta pagar, llorar y rezar para que la naturaleza se apiade del pueblo llanero, mientras Coviandina sigue cobrando los peajes más caros del país.

@FCuelloDuarte