Fue publicado el pasado jueves 14 de agosto, por parte de la Corte Constitucional, del auto 841 mediante el cual devolvió a la Cámara de Representantes la Ley 2381 de 2024 (Reforma Pensional), con el propósito de que se subsanara el vicio de procedimiento en que se incurrió en su trámite, solicitando que de nuevo se sometiera a discusión y votación de la plenaria de esa corporación la proposición sustitutiva presentada durante la sesión ordinaria del 14 de junio 2024.
La Corte había determinado que ese proyecto de ley no tuvo la discusión suficiente en esa corporación; es decir, se aprobó el texto que venía del Senado sin ningún cambio y sin darse la posibilidad de un debate sobre su contenido -articulo por articulo- ni la consideración de las proposiciones presentadas por varios Representantes.
Con base en un comunicado que expidió la Corte Constitucional el 17 de junio pasado, y sin conocer los detalles e indicaciones del auto, el gobierno nacional se apresuró a expedir un decreto convocando al Congreso a sesiones extras para subsanar el vicio de trámite mencionado. La Cámara sesionó el 27 y 28 de junio (viernes y sábado) con el supuesto interés de cumplir la petición de la Corte y con una votación de 104 votos a favor aprobó nuevamente el texto del Senado sin modificaciones.
Al final se podría concluir que la subsanación de la Cámara estuvo mal hecha porque no se esperó conocer y entender lo que la Corte quería que se hiciera. Es increíble que un gobierno, aparentemente dirigido por avezados excongresistas, como lo son el ministro del Interior y el mismo presidente, no haya tenido la sindéresis necesaria para visualizar ese vicio de trámite. Este limbo que se presenta con esta Reforma es un claro ejemplo de incompetencia gubernamental y legislativa.
Luego de que concluya su análisis riguroso de este proceso, en el que se determine si lo aprobado en las sesiones extras de la Cámara de Representantes subsanó o no el vicio de trámite identificado, la Corte finalmente podría declarar inexequible esta reforma o podría devolverla al Congreso para su discusión y aprobación final siguiendo las indicaciones del auto.
En el ínterin el gobierno nacional deberá disponer del presupuesto requerido para pagar el bono del pilar solidario a los adultos mayores que se encuentran en situación de pobreza extrema o vulnerabilidad, para lo que algunos expertos han dicho en forma reiterada que no se requiere esta reforma pensional.
@AELopezP