
Junior quedó a un paso de la meta
El equipo no pudo redondear un maravilloso semestre y conquistar la doble corona. Los tiburones perdieron su posibilidad de tocar el trofeo de la Liga al caer en tiros penales.
Fue un camino largo y culebrero, con subidas y con bajadas, con ilusiones y decepciones. Finalmente, Junior estuvo cerquita, muy cerquita, pero no llegó a la meta: la octava estrella.
Fueron 26 partidos, 15 victorias, ocho derrotas y tres empates durante la Liga Águila II.
El equipo comenzó la campaña con el pie derecho al vencer 2-0 al Cúcuta Deportivo en el estadio Metropolitano Roberto Meléndez.
Tuvo juegos para enmarcar como el 3-1 sobre Deportivo Cali, en Barranquilla; el 2-1 ante Millonarios, en Bogotá; el 2-0 ante Medellín, de local; el 6-0 frente al Chicó FC, también en casa; el 3-1 contra Santa Fe, en la vuelta de los cuartos de final; y el 2-1 ante Nacional, en el juego de ida de la finalísima, en el ‘Metro’.
Sufrió con derrotas inesperadas como el 2-0 ante Uniautónoma FC en la décima fecha y el 4-0 ante los verdes, en el propio estadio Metropolitano Roberto Meléndez, en la jornada 16.
No obstante, fueron más los momentos alegres que los tristes, hubo más dicha que sufrimiento.
Junior batalló en la Liga al mismo tiempo que lo hacía en la Copa Sudamericana y en la Copa Águila. De este último torneo sí terminó siendo monarca.
Le faltó poquito, tal vez una mejor puntería, para lograr el objetivo.