Los gobernadores en ejercicio y electos, la iglesia católica y los dirigentes de la Región Caribe firmaron la llamada Declaración de Sincelejo en la que plantean la necesidad de darle un trato preferencial a los sectores rurales dado su mayor grado de atraso y desigualdad, como estrategia para alcanzar la equidad en la región. Lo anterior teniendo en cuenta la importancia de las actividades rurales en la economía y la sociedad caribeña, 'en las zonas rurales hay mayor pobreza y el más claro atraso de la Región Caribe' dice la declaración firmada por los gobernadores, Eduardo Verano, Jorge Barraza Farak y Cristian Moreno, al igual que por Monseñor Nel Beltrán Santamaría, el gobernador electo de Sucre Julio Guerra Tulena y varios dirigentes regionales.
Consideran además que hay la necesidad de aplicar políticas públicas integrales para poder luchar contra la pobreza rampante, a través de un mayor y mejor gasto social, un crecimiento económico que genere más empleos y un manejo ambiental sostenible.
En el documento que contiene 10 puntos fundamentales dejan claro que es urgente mejorar los servicios públicos y la infraestructura vial de toda la Región para lograr el desarrollo y poner a su gente en el camino de la competitividad de su economía.
Hacen especial énfasis en el mejoramiento de la calidad educativa para que sea pilar de la valoración y arrojo de la cultura regional como elemento fundamental para lograr el crecimiento social y económico de la costa.
La Declaración de Sincelejo, advierte de manera expresa la necesidad de que los nuevos gobernantes hagan un manejo probo de los recursos públicos como una condición para alcanzar la sociedad caribe democrática, equitativa y justa que es finalmente el anhelo de tener una Región Caribe.
Por último proponen que los gobernantes deben debatir todos los planes de desarrollo con la sociedad civil y hacer encuentros permanentes entre los poderes públicos con la sociedad civil como una muestra de mecanismo de participación.
Por Jaime Vides Feria
Sincelejo
