Con el argumento de que el material fue obtenido de manera ilícita, la Sala Penal de la Corte Suprema de Justicia desacreditó la información hallada en los computadores de Raúl Reyes como una prueba en el proceso que vincula al exrepresentante a la Cámara del Polo Democrático, Wilson Borja, con la guerrilla de la Farc.
Consideró el Alto Tribunal que los militares no son Policía Judicial y no tenían autorización para recoger pruebas fuera del país, por lo tanto no siguieron principios legales de procedimiento, y decidió archivar el proceso.
Piedad Córdoba podría utilizar este argumento para apelar una sanción de destitución e inhabilidad por vínculos con las Farc por 15 años, a manos de la Procuraduría General de la Nación.
A Córdoba la inculparon por la existencia de unos archivos magnéticos que hallaron en ese mismo computador, y en los cuales, según la Procuraduría, los nexos de la exsenadora con las Farc eran con fines políticos y no iban encaminados a la constitución de un acuerdo humanitario.
La Corte Suprema de Justica archivó en el pasado los procesos de los dirigentes del Polo Gloria Inés Ramírez y Jorge Enrique Robledo, además del liberal Luis Fernando Velasco, también por la ‘Farcpolítica’.
