El día que Almudena Grandes visitó Barranquilla
La escritora española que falleció este sábado, en 2011 fue una de las invitadas del Carnaval Internacional de las Artes. El Teatro Amira de la Rosa fue testigo de su brillantez.
La literatura iberoamericana lamenta hoy el fallecimiento de Almudena Grandes. A sus 61 años la escritora se convierte en otra víctima del cáncer en el mundo de las letras.
La madrileña, reconocida también por su activismo político de izquierda y ser una feminista casi que genética, “era una mujer directa, divertida y socarrona, que decidió resucitar con su escritura y sus extraordinarias dotes de narradora la memoria de los que perdieron la guerra civil” en España con su literatura y en sus crónicas periodísticas, como la describe Carmen Naranjo en un perfil escrito para la agencia Efe.
Con una carrera más que consolidada, Grandes visitó Barranquilla en febrero de 2011. El motivo, participar en el Carnaval Internacional de las Artes de Heriberto Fiorillo.
En el Teatro Amira De la Rosa, hoy cerrado, el sábado 19 de febrero de ese año la escritora española se sentó a conversar con el periodista Marco Schwartz Rodacki, quien años más tarde fungió como director de EL HERALDO.
Esa tarde-noche también se presentaron La Tigresa del Oriente y la cantante africana Oliver Mtukudzi. Las mujeres fueron las grandes protagonistas con literatura, música y desde distintas latitudes: España, Perú y Zimbabwe.
Pero volviendo al diálogo entre Almudena Grandes y Marco Schwartz, el también novelista recordó en su cuenta de Twitter el encuentro con su colega.
“Ha fallecido la gran escritora Almudena Grandes. Para el recuerdo: hace 10 años estaba en Barranquilla como invitada en el Carnaval de las Artes, y yo tuve el privilegio de entrevistarla. Con su inteligencia y su gracia, se metió a público el bolsillo”, escribió Schwartz.
‘Las edades de Lulú’, novela erótica que publicó en 1989 y que la lanzó a la fama (un año más tarde fue adaptada al cine por Bigas Luna), fue uno de los temas principales manejados en la conversación.
Situada en el Madrid de la Transición, el libro relata las vicisitudes de Lulú, una joven que se enamora de un amigo de su hermano siendo casi una niña y acaba estableciendo con él una relación presidida por la experimentación sexual y el dominio emocional, describe una reseña de Efe.
Así, recordando otros títulos importantes de su legado literario y periodístico hasta ese momento, que incluye la misión que ella misma se impuso de recordar la España franquista en “su proyecto literario más querido: los ‘Episodios de una guerra interminable’”, que publicó en 2010, la prolífica autora se metió en el bolsillo, como describe Schwartz, al público presente en el Amira de la Rosa.
Ella, sonriente y con un fino sentido del humor, dio a conocer en esos pocos minutos a la mujer por la que hoy llora la literatura iberoamericana.
