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Por:  Redacción Deportes

Sigue la violencia y el fanatismo desbordado en el fútbol colombiano. Barristas del Once Caldas invadieron la cancha del estadio Palogrande de Manizales, en el partido que el cuadro manizalita perdía 2-1 ante Alianza Petrolera, este martes en la jornada 14 de la Liga.

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Corría el minuto 89 cuando integrantes de la barra Holocausto Norte se tomaron el terreno de juego para recriminar y agredir a los jugadores por su desempeño y los malos resultados que tienen a la escuadra caldense al borde del descenso.

El árbitro Mauricio Moreno interrumpió el partido y lo dio por terminado.

Los fanáticos blancos, con otras palabras y gestos obscenos, exigían a los futbolistas se esforzaran más y sudaran la camiseta.

El lateral antioqueño Marlon Piedrahíta fue uno de los agredidos. Recibió una patada por la espalda y prefirió bajar la cabeza y continúa su camino sin responder a la agresión.

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