Vemos alarmados cómo se ha disparado la COVID -19 en Barranquilla y en poblaciones vecinas, siendo la indisciplina ciudadana la razón predominante. Y todo hace indicar que ese estúpido comportamiento está tan arraigado, que ni con la posibilidad de morirse se ha logrado superar, excluyendo aquellos que salen porque están obligados a trabajar en la calle.
Pero no es menos cierto que cada situación requiere de una planificación de acuerdo a las circunstancias. En ese sentido, lo que pretendí insistir en mi columna del pasado martes, es que así como se ha repetido y se sigue repitiendo por todos los medios acerca de las medidas preventivas, tales como el lavado frecuente de las manos, el uso del tapabocas, el cumplimiento con el distanciamiento entre personas y el aislamiento de acuerdo al pico y cédula o por edad, protocolo ampliamente difundido para evitar que se contagie la gente, también se debería iniciar desde ya una urgentísima campaña de muy amplia difusión, que informe sobre aquellas medidas o acciones que son de importancia vital, y que debería iniciar y poner en práctica todo aquel que sienta los primeros síntomas del COVID-19 para tratar de revertir el virus antes de que este invada sus órganos vitales.
Y esos síntomas son: fiebre, malestar general, tos y dolor de garganta, aunque finalmente pueda resultar siendo solo el malestar propio de una simple gripa o resfriado común. Y como cada día cuenta, todo afectado debería iniciar un tratamiento adecuado desde el mismo primer día.
Para masificar esa importantísima información nada sería mejor que una tremenda campaña oficial, para lo cual con certeza, tanto alcaldía como gobernación, lograrían el concurso de prensa, radio y TV, sin costo publicitario, utilizando además las redes que son un medio masivo gratis, con visitas de las secretarías de salud, casa por casa, y con impresos a repartir en semáforos, buses, etc.
Como me aterra que personas mueran por desconocimiento, transmito aquí un compendio de los conceptos de médicos colombianos y extranjeros que he recibido por las redes y el consenso de seis reconocidos médicos locales a quienes he consultado, convencido de que sus recomendaciones pueden ayudar a muchos, porque se trata de medicamentos muy comunes.
Aclarando que estas son solo medidas a tomar mientras se espera la atención médica especializada, IPS, EPS o Secretaría de Salud, No en reemplazo de esa atención. Los médicos manifi estan que de arrancada, hay que combatir los efectos asociados a la gripe para eliminar la tos, el estornudo y el flujo nasal, que son factores que contagian a quienes estén cerca, tomando para esto un antigripal como loratadina u otros. Como antiinflamatorio: tomar Ibuprofeno de 400 mg. cada 8 o 12 horas. Para evitar trombo-embolismo: tomar una cardio-aspirina o aspirineta cada 8 o 12 horas. Para disminuir la respuesta inflamatoria: inyectarse, inhalar o tomar un corticoide de acción rápida. Para nivelar el pH: tomar mucho limón, una dieta alcalina y mucha agua.
Lo anterior es lo más básico. ¡Y más fácil imposible! Dicen los médicos aludidos que lo ideal es iniciar ese tratamiento desde el primer síntoma, pero que así mismo, es absolutamente indispensable la atención médica inmediata. No soy médico, pero siento la urgencia de transmitir algo que podría salvar vidas. Ojalá las autoridades y el cuerpo médico local emitieran en conjunto, un comunicado oficial e iniciaran una campaña de divulgación masiva.