El nuevo documental de la conocida directora americana Margaret Brown relata la historia real de los descendientes del Clotilda, el último barco que partió de África a Estados Unidos transportando ilegalmente seres humanos como carga para trabajar como esclavos.

El barco llegó a Mobile, Alabama, en 1860, después de haber sido prohibida esta práctica. Imposibilitados de volver, los integrantes del barco y sus descendientes crearon la comunidad conocida como Africatown, que subsiste hasta hoy día bajo precarias condiciones económicas.

Tras mucha especulación y engaño respecto al destino del barco, el cual fue destruido para borrar cualquier evidencia, su hallazgo en 2019 por parte de arqueólogos marinos, casi un siglo después revela la necesidad de reclamar justicia.

Pero ¿es esto posible considerando la dimensión del daño provocado a través de generaciones? Porque además del aspecto histórico, el documental refleja las condiciones de vida por las que han pasado los integrantes de esta comunidad, afectada por todo tipo de irregularidades de orden económico y ambiental a través del paso de los años.

El filme, presentado por Netflix y producido por Higher Ground Productions, la compañía de Michelle y Barak Obama, da voz a personajes olvidados por la historia, y abre los ojos hacia otras consecuencias no consideradas hasta el momento respecto al tema de la esclavitud.

La película transmite la importancia de la tradición oral cuando se trata de recuperar el pasado, la necesidad de preservar la costumbre hacia generaciones futuras, y, por ende, el concepto de que la historia sigue viva y en desarrollo. Sólo así se puede evaluar las posibles formas de canalizar este hallazgo y lograr algo beneficioso para la comunidad.

Los testimonios son honestos y convincentes, exentos de manipulación, aunque por lo sensible e injusto del acontecimiento, es imposible no sentir frustración y rabia. Porque por más que se busque la manera de compensar, nunca será suficiente.

El documental tuvo su premier en el Festival de Sundance donde recibió el Premio Especial del Jurado, y se presentó también en el New York Film Festival, con muy buena acogida de parte de la crítica.

Brown es conocida en el género por sus importantes documentales que han tratado temas sociales de trascendencia, exponiendo y educando a la vez. Entre ellos, Be Here to Love Me: A Film About Townes Van Zandt (2004) donde relata la historia del artista tratado con electroshock por diagnóstico de esquizofrenia; The Order of Myths (2008), sobre la necesidad de preservar las tradiciones; The Great Invisible (2014) que se dedica a la causa del medio ambiente, exponiendo lo sucedido en Estados Unidos con el accidente del derramamiento de petróleo que causó la muerte de 11 obreros. También hizo parte de la serie Dirty Money, también en Netflix.

Descendientes es la validación de una comunidad que trató de ser borrada de la historia por aquellos que tenían el poder de contarla. Hoy día sus integrantes toman la palabra para reafirmar su identidad y la de sus descendientes.