Hay dos aspectos que siempre debemos tener presente en todo lo que tiene que ver con la formación: la educación para la vida y la educación para el ser. Es decir, para lograr completar ese anhelo de trascendencia que tiene el ser humano, pero también para poder insertarnos activamente en el mercado laboral.

Hay que reconocer que la humanidad va cambiando en la medida en que nuevas generaciones se van incorporando a toda la dinámica económica. Por eso, es fundamental que desde las universidades podamos entender las diferencias generacionales y cómo cada una está aprendiendo diferente. Cada día nosotros en las aulas estamos llamados a afrontar ese reto tan grande de cómo educar, cómo lograr que cada estudiante dependiendo de su generación pueda tener un proceso de formación exitoso.

Caso por caso

Hemos logrado detectar algunos de los principales rasgos de nuestras actuales generaciones que aún quieren formarse. Por ejemplo, los ‘Baby Boomers’, esa generación entre 1946 y 1965, tienen una completa convicción por el liderazgo y la trayectoria; con ellos el trabajo que hacemos desde Educación Continua puede ser vital para actualizarlos y que se adapten a nuevos espacios laborales.

En el caso de la Generación X’, los nacidos entre 1965 y 1982, son hombres y mujeres marcados históricamente por grandes cambios sociales. También fueron testigos de las revoluciones más importantes en términos de tecnología, videojuegos y como no: la llegada del internet.

Para ellos la educación actual tiene un muy importante espacio en su capacitación en manejo de las TIC, gerencia de proyectos y emprendimientos. Muchos sueñan con poner su negocio y en eso debemos ser las universidades las encargadas de dotarlos de herramientas para hacerlo. Tenemos que expandir toda su experiencia con formación y conocimiento actual.

Ahora, hablemos de los ‘Millennials’, nacidos entre 1982 y 1994, ellos han estado profundamente influenciados por los cambios en las industrias culturales. Crecieron con el uso (a veces el abuso) de las tecnologías de la información y para ellos no es nada extraño educarse de forma virtual o digital.

Laboralmente hablando esta generación hace uso de las tecnologías de la información y la comunicación para la educación. Entonces, no podemos dejar escapar la incorporación de todo esto en los procesos formativos y la aparición de nuevos puestos de trabajo para los cuales hay que pensar en ellos. Muchos quieren aprender para emprender y desde las aulas tenemos esa oportunidad.

No podemos dejar de hablar de la ‘Generación Z’: los nativos digitales que se caracterizan desde su niñez por el uso del internet como algo fundamental. Muchos no quieren ingresar formalmente al mundo laboral sino que por el contrario quieren ser ‘freelance’; conciben el hecho de acceder a la educación y a la información ya como un valor agregado.

Debemos tener profesores preparados en temas TIC, que puedan comprender cómo relacionarse con los diferentes grupos. Debemos entender qué estrategias de aprendizaje usar. Tenemos que llevar a cabo un proceso de enseñanza y aprendizaje integral, que aborde la tecnología como una herramienta poderosa para aprender.

*Rectora de Areandina (Valledupar).